Algo mejoran los datos, pero de momento no lo suficiente como para acortar la gran distancia que separa el sistema educativo balear del promedio nacional (ya no digamos del europeo). Por ejemplo, se ha detectado en los últimos años una leve subida del nivel de formación, pero aún así el archipiélago sigue teniendo los porcentaje más pobres del país en cuanto a población universitaria o graduados en Secundaria.

Así por ejemplo un 55% de los jóvenes de Balears de entre 20 y 24 años tienen la segunda etapa de Educación Secundaria (Bachillerato o FP Media), lo que implica una mejora de tres puntos respecto a 2003, pero igualmente estamos a 8,3 puntos del resto del país. En este indicador -como sucede con muchos otros- los datos arrojan diferencias significativas entre hombres y mujeres, logrando ellas mejores resultados.

Otro dato clave en el que algo ha mejorado el sistema balear: el abandono temprano. En 2013, la proporción de jóvenes que se plantaron y dejaron los estudios tras finalizar la ESO fue de un 32%, lo que supone el peor dato del país pero a la vez implica una mejora respecto al 2003, cuando el abandono precoz afectaba al 41% de los jóvenes de entre 18 y 24 años.

¿Por qué aunque demos pequeños pasos seguimos alejados de los promedios del resto del país? Las razones no son ninguna sorpresa: "Un contexto laboral especializado en los servicios y con un carácter estacional". De esta forma lo recoge la investigadora Belén Pascual en su artículo, El sistema educativo no universitario en Balears en cifras, en el Anuari de l'Educació 2015 de la Universitat y la Fundació Guillem Cifre de Colonya.

Otro dato que va in crescendo es el de graduados en Bachillerato, actualmente del 39,7% en las islas. Seguimos lejos del 53% de promedio español, pero va subiendo (en 2011 era del 37%). También es significativo que el 28,7% de la población activa de Balears tiene estudios universitarios, tasa que ha ido mejorando pero sigue 8,7 puntos por debajo de la media estatal.

La repetición de curso

El artículo hecho por esta doctora en Ciencias de la Educación se complementa con otros del Anuari, como el realizado por Bartomeu Cañellas y Heracli Portas sobre la repetición de curso; otro indicador que mejora (cada vez más alumnos están en el curso que les corresponde por edad) pero no lo suficiente para equipararnos al resto del país y menos a comunidades con buenos indicadores.

De este forma, en 3º de ESO el porcentaje de repetidores en Balears es del 13,3%: 1,3 puntos por encima de España en general y 6,5 puntos por encima de Cataluña. Otra manera de verlo es fijándose en la tasa de idoneidad, la proporción de alumnos que están en el curso que les corresponde según su edad. En España, 38% de los quinceañeros ya ha repetido uno o más cursos. En Balears son ya el 44%. En Cataluña baja hasta el 26%.

Cañellas subrayó que es necesario reflexionar y actuar ante estos datos, sobre todo teniendo en cuenta lo recurrente que es la repetición en nuestra comunidad pese a haberse demostrado como una herramienta "ineficaz".

Este año el Anuari cuenta con 25 artículos hechos por 45 autores. Uno de ellos - otro "clásico" según lo catalogó Carmen Orte, la codirectora del volumen- es Lluís Vidaña, quien tras analizar la atención que reciben los estudiantes inmigrantes (en descenso los últimos años) concluye que es urgente "trabajar ya" la interculturalidad en los centros y adoptar "medidas consistentes para la integración".