Serveis Ferroviaris de Mallorca utiliza un sistema informático para lanzar los trenes desde una estación a otra y determinar si las barreras de los pasos a nivel deben estar abiertas o cerradas.
Este programa informático se encarga de sustituir a los antiguos jefes de estación que llamaban cuando llegaba el tren y comunicaban que la vía estaba libre para dar la salida al segundo ferrocarril.
Los técnicos apuntan que este sistema tiene un buen comportamiento y como en todas las infraestructuras de este tipo se pueden producir fallos.
Existe una normativa estatal que prohíbe tener cerrados los pasos a nivel cuando no pasa el tren, para no impedir la circulación a los residente. Este sistema informático avisa al conductor de que la barrera está abierta y en caso de que el maquinista no confirme que está al corriente de ello, automáticamente frena el tren. El sistema controla los trenes en función del tiempo.
En algunos casos en que el convoy permanezca más de lo prevista en una estación (las paradas mínimas son de 25 segundos) por una avería o porque debe bajar o subir una persona con discapacidad, se debe realizar lo que se entiende en el argot como un "rearme de tiempo". Los técnicos consultados apuntan que en estas situaciones se puede dar el caso de que el sistema informático de por cambiada la situación del ferrocarril y, debido a que las barreras de los pasos a nivel solo deben cerrarse cuando pasa el tren, queden levantadas. En cualquier caso, otro dispositivo avisa en varias ocasiones del estado de las barreras. Si el maquinista no responde automáticamente la locomotora se parará.
El frenado automático fue una de las últimas incorporaciones en sistemas de seguridad instalado en 2013. Además del estado de las barreras, este sistema también actúa en caso de que el tren vaya a una velocidad superior y las vías estén desviadas.
