Iñaki Urdangarin, que el año próximo será juzgado en Palma por liderar una supuesta trama de desvío de fondos públicos, ha pedido permiso al juez Castro para poder vender dos de sus pisos en Palma, unas propiedades situadas en la calle Pedrera y que están embargadas para cubrir las fianzas millonarias del caso Nóos.

La inmobiliaria Aizoon, que poseen al cincuenta por ciento Iñaki Urdangarin y su esposa la infanta Cristina, también acusada en el mismo juicio, compró en 2004 dos pisos en la finca número 8 de la calle Pedreras, a escasos metros del Paseo Marítimo. Los exduques de Palma también adquirieron dos plazas de aparcamiento y otros tantos trasteros, que ahora desean vender. Aizoon pagó por los pisos, estacionamientos y trasteros 419.000 euros y se supone que ya dispone de compradores para los mismos.

Los duques de Palma alquilaron las viviendas y tuvieron problemas con una de las inquilinas, que no pagó las rentas y fue desahuciada judicialmente.

Urdangarin compró en 2003, aunque a nombre de Nóos S.L., tres pisos en la calle Marqués de Fontsanta de Palma, unas propiedades que no están embargadas por el juez Castro.

La infanta Cristina ofreció su mitad de las propiedades de Aizoon para cubrir su responsabilidad civil en Nóos, que hace unas semanas fue rebajada por la Audiencia de Palma. Los exduques de Palma necesitaron la autorización de Castro para enajenar su palacete de Pedralbes (que estaba embargado). Por otro lado, la abogada Pilar Gómez Pavón ha dejado de formar parte de la defensa del acusado Jaume Matas.