Los sindicatos UGT y CC OO han aplaudido la mejoría que se está registrando en las cifras del mercado laboral de las islas, pero consideran que la situación que se vive en Balears no permite generar euforias debido a la baja calidad del nuevo empleo que se crea y a los bajos salarios que lo acompañan, según pusieron ayer de relieve sus portavoces en esta materia, Esperança Barceló y Silvia Montejano respectivamente.

Barceló no ocultó lo positivo que resulta que la tasa de paro de las islas sea muy inferior a la estatal, pero al mismo tiempo lamentó la elevada temporalidad de las nuevas contrataciones y además subraya que unos 70.000 isleños estén ganando menos de 8.000 euros al año. "Mientras haya trabajadores pobres no se puede afirmar que la crisis ha acabado ni que la recuperación es un hecho", manifestó.

También Montejano valoró el descenso que se ha registrado en el desempleo balear, pero al mismo tiempo lamentó el elevado número de desocupados de larga duración que existe en las islas, e insistió en que más de 89.000 parados en plena temporada turística resulta una cifra claramente excesiva. Según la representante de CC OO, resulta necesario que el Govern adopte medidas para diversificar el modelo productivo del archipiélago, ante la evidencia de que el modelo de turismo de 'sol y playa' resulta claramente insuficiente para ofrecer un puesto de trabajo a todas las personas que lo necesitan. Para ello, reivindicó la reactivación del diálogo social.

La presidenta de la patronal CAEB, Carmen Planas, calificó de positiva la evolución que se está registrando en el mercado laboral balear, con un apreciable incremento de las personas que disponen de un puesto de trabajo, aunque apuntó también la necesidad de seguir trabajando para mantener esa tendencia. Al respecto, afirmó que la prioridad de esta organización empresarial no pasa solo por general el empleo necesario para los isleños, sino para que éste sea también estable y de calidad. En este sentido, se felicitó por el incremento que se ha producido en la contratación a jornada completa. Por ello, reclamó del Govern la aplicación de medidas que ayuden a mejorar la competitividad de las empresas de Balears.

El presidente de PIMEM, Antoni Mas, también hizo hincapié en la buena evolución del mercado laboral, pero advirtió de que 89.500 parados en plena temporada turística resulta un dato muy preocupante, especialmente si se tiene en cuenta que 40.200 son de larga duración. Por ello, reclamó un esfuerzo para atraer a un turismo de mayor poder adquisitivo y una mayor diversificación de la economía del archipiélago.