El Govern, con la presidenta Francina Armengol y el vicepresidente Biel Barceló al frente, realizó ayer el balance de sus 100 días al mando de la comunidad autónoma y fijó sus objetivos a medio plazo. Reclamó un "frente común" de toda la sociedad balear para exigir a Madrid una mejora de la financiación y un régimen especial que ponga a las islas en la media nacional. Al mismo tiempo, no descartó acudir a la vía judicial para exigir el pago de las inversiones estatutarias que el Gobierno central adeuda a las islas. El Ejecutivo autonómico se esforzó para cuidar la puesta en escena de la valoración de los 100 días . Fue en el patio del Consolat con todos los consellers detrás y la presidenta y el vicepresidente en primer plano.

"Pase lo que pase en las elecciones del 20 de diciembre, este Govern trabajará de forma intensa para conseguir un nuevo sistema de financiación que acabe con el maltrato que ha recibido Balears de Madrid", indicó Armengol. La presidenta añadió que quiere poner en marcha un "frente común de la toda la sociedad isleña, empezando por las empresas, entidades y todos los partidos políticos, para reclamar al Gobierno central lo que es justo para las islas". La jefa del Ejecutivo recordó que la comisión mixta para evaluar el cumplimiento de las inversiones estatales en las islas hace más de cinco años que no se ha reunido y que ahora se volverá a poner en marcha. De igual modo, denunció la "herencia recibida de Bauzá con 8.945 millones de euros" de deuda.

En este mismo apartado de las inversiones estatutarias, Biel Barceló aseveró que tienen previsto "recurrir por la vía judicial" todos los proyectos que concluyan sus periodos de ejecución y Madrid no los haya pagado. Hay que recordar que el Govern reclama a Madrid el pago de 1.300 millones de euros en inversiones comprometidas desde el año 2007.

Empezó interviniendo Barceló para analizar los primeros tres meses de Govern de izquierdas: "Después de cuatro años de recortes hemos vuelto a la normalidad y recuperado el diálogo , tal como nos ordenaron las urnas el 24 de mayo. En estos 100 días se han puesto en marcha medidas estructurales en favor de las personas que contemplaban los acuerdos para el cambio con el apoyo de Podemos".

Por su parte, Armengol empezó su valoración hablando de un "Govern que está trabajando a destajo desde la unidad y el diálogo". La presidenta apuntó que el camino político iniciado significa un cambio radical con respecto a la "crispación, políticas de austeridad y falta de consenso del Govern del PP". En este sentido enumeró las principales logros alcanzados por su Ejecutivo en estos tres meses al frente del Consolat: "Recuperación de la paz social en las escuelas, la contratación de 364 nuevos profesores y las iniciativas impulsadas en favor de las personas más vulnerables". Entre estas últimas, Armengol destacó la "devolución del derecho a la sanidad a los inmigrantes irregulares, la renta social que se implantará en 2016 y los programas de ayuda a los escolares sin recursos y de empleo para jóvenes y parados mayores de 45 años".

En el repaso a los 100 días de Govern fue inevitable tener que hablar de las desavenencias con Podemos, la formación que apoya desde fuera al Ejecutivo. Armengol citó al líder del partido de los círculos para describir la situación: "Necesitamos confiar más unos con los otros". Pese a ello, defendió la unidad y coordinación con Més y el cumplimiento a rajatabla de los acuerdos del pacto de izquierdas. Sobre las fricciones con Podemos, la presidenta consideró que son "el fruto de la pluralidad política que reflejaron las urnas el 24 de mayo".

Los proyectos inmediatos

Francina Armengol enumeró todos y cada uno de los proyectos e iniciativas que pondrá en marcha el Govern en los próximos meses. Anunció que ya están ultimando la elaboración de su primer presupuesto para el 2016. Unas cuentas públicas que tendrán como eje principal los "temas sociales" y que permitirán "recuperar derechos" a los trabajadores públicos, en clara referencia a la movilización de los funcionarios para reclamar la carrera profesional.

A renglón seguido, detalló los temas capitales que ocuparán a su Govern una vez aprobados los presupuestos. Este es el caso de un plan de choque para el alquiler social, la apertura por la tarde de los centros de salud, una apuesta por los espacios naturales con la ampliación de las reservas marinas, un plan contra la violencia de género, una oficina anticorrupción y una campaña contra el fraude fiscal para castigar a quien no cumple la ley". De igual modo, la presidenta indicó que se está trabajando en la fusión de algunas empresas públicas para reducir el sector público instrumental.

Sobre los presupuestos, Armengol admitió que la negociación previa "ya se está haciendo con Podemos, pero me gustaría abrir el consenso a las otras formaciones políticas".

Biel Barceló se refirió al tema estrella de su departamento: la ecotasa. "Tenemos proyectos capitales en los próximos meses, y uno de ellos será el impuesto turístico", aseveró el vicepresidente del Govern. El también conseller de Turismo añadió que la ecotasa "será esencial en el impulso de un turismo que apueste por la calidad, la innovación y la sostenibilidad".

PP: "Bailan en vez de gobernar"

El Partido Popular también analizó ayer los 100 días del Govern. La portavoz popular, Margalida Prohens, los definió con varias frases contundentes: "El Pacto ha preferido bailar a gobernar", indicó la líder de la oposición. De igual modo, apunto que "este Govern es un cóctel explosivo que no se merecen los ciudadanos, ya que la presidenta Armengol es un títere en manos de unos socios radicales". Criticó con dureza la aplicación de la ecotasa, el "culebrón" con Fernández Terrés y la colocación de familiares. "En lo único en lo que se ha puesto de acuerdo la izquierda es en bailar la conga", apostilló Prohens.