Los dos jóvenes juzgados por realizar pintadas con insultos al expresident Bauzá y depositar basuras frente a la puerta de su farmacia de Marratxí negaron ayer ser los autores de los hechos. A pesar de su negativa, la fiscalía les imputa un delito de injurias graves a un funcionario público, dado que entre otras cosas llamaron"fascista" a Bauzá. Se reclama una multa de 5.000 euros a cada acusado.

Los hechos se fueron repitiendo desde el mes de noviembre de 2012 hasta el mes de junio del año siguiente. Unos desconocidos empezaron a lanzar huevos sobre la fachada de la farmacia, pero terminaron realizando pintadas con un espray, con expresiones como "Bauzá nazi, asesino, PP nazis fuera".

La farmacia del expresident dispone de un sistema de grabación. Las imágenes fueron entregadas a la Guardia Civil, que finalmente identificó a los dos acusados. En realidad no se les reconoce en las imágenes, sino que fueron detenidos a través de la identificación de un coche, que es propiedad de una de las acusadas. Al otro implicado se le detuvo indagando a través de un perfil social de la sospechosa. Ambos amigos aparecen juntos en varias fotos. El peinado del joven coincide con el que llevaba el autor de estas pintadas.

Los dos jóvenes negaron los hechos y defendieron su inocencia. Solo la mujer reside en Marratxí, mientras que su amigo vive en s'Arenal. Ninguno de ellos recordaba lo que hicieron en las fechas que se produjeron las pintadas, si bien el teléfono móvil de uno de ellos le sitúa uno de esos días en los alrededores de la farmacia del expresident Bauzá.

A pesar de la negativa de los dos acusados, los investigadores de la Guardia Civil mantienen que fueron los autores. Explicaron que a través de las imágenes de la grabación no se puede identificar a los autores, dado que actuaron con el rostro tapado. Sin embargo, se aprecia un coche de color rojo. Se estuvo buscando este vehículo por toda la isla, hasta que fue localizado por los alrededores del castillo de Bellver.

Así se identificó a la mujer. Para recoger más datos sobre los dos sospechosos la Guardia Civil indagó también en los gimnasios a los que acudían. Así se pudo averiguar el número de sus respectivos teléfonos móviles. Uno de estos aparatos sitúa a uno de los sospechosos en los alrededores del lugar de los hechos. Al otro no.

Uno de los agentes señaló que en la imagen se aprecia que el varón lleva un peinado con rastas. Este aspecto coincide con el estilo que luce uno de los dos acusados. Los jóvenes confesaron que mantienen una estrecha amistad y que suelen quedar con frecuencia. La defensa mantiene que no existen pruebas contra ellos.