El constructor Gabriel Sampol ha declarado hoy ante el juez de Instrucción José Castro que el expresidente del Govern Jaume Matas le informó de que estaba excluido del proyecto para construir el hospital Son Espases un día antes de que se reuniera la mesa de contratación para conocer las valoraciones.

Sampol ha declarado como testigo ante el juez Castro, que investiga el presunto amaño del concurso para construir el hospital, la mayor obra pública realizada en el archipiélago, por presuntos delitos de prevaricación continuada, falsedad documental y fraude a la administración pública en la adjudicación de la construcción, gestión y mantenimiento de Son Espases.

Sampol ha reiterado hoy ante el juez lo que ya había declarado el año pasado al fiscal Anticorrupción Pedro Horrach y ha explicado que Matas le citó en la sede del Govern balear, el 20 de junio de 2006, para comunicarle que su empresa era excluida del proyecto del hospital, el día antes de que la mesa de contratación recibiera el informe de la consultora Global PM que valoraba los seis proyectos que se habían presentado.

Ha precisado que su empresa recibió la exclusión por parte de la mesa de contratación el día 21 de junio de 2006, pero Matas se lo había comunicado la víspera: "Primero nos lo dijeron personalmente".

Al finalizar su declaración ante el juez Castro, el propietario y administrador de Sampol Ingeniería y Obras ha detallado a los medios qué fue lo que ocurrió en esa reunión a la que acudió con su hija: "Matas nos dijo que estábamos excluidos, fue un jarro de agua fría".

"Nos habíamos hecho tantas ilusiones con este proyecto, le habíamos destinado tantos recursos humanos y económicos, que estábamos convencidos de que ganábamos porque el mejor proyecto, sin lugar a dudas, era el nuestro", ha asegurado Sampol.

Ha detallado que su proyecto fue excluido "por haber planificado una planta más, que luego se ha tenido que hacer", en el aparcamiento. "Y la hemos tenido que pagar todos los mallorquines", ha añadido.

"Eso lo hicieron a quien Matas puso al frente de los estudios y con nosotros, de una manera clara, utilizaron un subterfugio para dejarnos fuera porque éramos los más temibles al haber hecho el mejor proyecto y con el mejor precio", ha afirmado. "A estos hay que sacarlos, y nos excluyeron", ha enfatizado.

Perder el proyecto de Son Espases fue un golpe para su empresa, ha detallado el constructor, que ha defendido que su proyecto había sido elaborado en su totalidad por parte de empresas mallorquinas. Sobre quién cree que debería haber hecho esa obra, Sampol ha asegurado: "Tenía que haberse quedado aquí".

"Esta manera tan astuta de dejarnos fuera nos afectó y todavía lo pagamos. Nos afectó porque teníamos un proyecto muy importante y para una empresa algo así es un bache", ha declarado Sampol, quien considera que "al que trabaja, le pegan".

Ha insistido en que su proyecto era el más adecuado: "Los únicos que descubrimos que faltaba una planta fuimos nosotros porque trabajamos mucho en el proyecto, y sirvió para echarnos".

A preguntas de si en aquella época se pedían comisiones para adjudicar las obras, Sampol ha dicho que únicamente ha oído "comentarios" sobre ello. "Pero nosotros solo nos presentamos a esta obra, en lo demás íbamos con UTE y no figurábamos", ha señalado.

"Tal vez si me hubieran pedido comisiones y la hubiera pagado no estaría aquí, estaría explotando Son Espases", ha concluido.

Hoy están citados también a declarar como testigos el exconcejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Palma Javier Rodrigo de Santos, el entonces decano del Colegio de Economistas Esteban Bardolet y el exdirector de la edición balear de El Mundo Eduardo Inda.