­Mateo Isern no tendrá el camino totalmente allanado para ser el número uno por Balears de la lista del PP al Congreso de los Diputados. Los otros cargos del partido que también están interesados en la plaza pugnarán seriamente por disputársela al exalcalde de Palma. En este sentido la apuesta del sector crítico no cuenta con el aval de la actual dirección, que opta por mantenerse al margen.

Miquel Vidal, presidente interino de la formación, confirmó ayer que habrá rivalidad, dejando entrever claramente que Isern no cuenta hoy por hoy con el respaldo unánime para ser el candidato; no al menos por parte del aparato. Preguntado sobre si habrá más aspirantes que el exalcalde palmesano, Vidal respondió afirmativamente. "Si solo hubiera uno, no tendría sentido", remató. "Yo espero que haya mucha pluralidad de aspirantes", enfatizó además el líder de los populares, para quien "esto significará que el partido está vivo".

La secretaria de Estado de Turismo, Isabel Borrego, o el actual diputado en Madrid Miquel Ramis son otros de los nombres en liza. También se ha hablado del exconseller de Hacienda, el ibicenco José Vicente Marí. Con todo, ha trascendido el pacto tácito entre Ramis y los críticos para que ceda ´su´ puesto a Isern y a cambio concurriría como número uno al Senado.

Sin embargo, el actual núcleo duro que controla el PP no está por la labor de decantarse por un perfil en concreto, por lo que la identidad del que será el candidato a las generales está sin decidir y todavía abierto. Según fuentes populares, Vidal quiere evitar al máximo la batalla inevitable que se librará para elegir al futuro cabeza de cartel, y "no quiere mojarse".

Que elija Madrid

De hecho, internamente el presidente incluso ha tanteado la posibilidad de enviar los currículums a Madrid y que sea la dirección del PP en la calle Génova la que decida quién debe ser el número uno por las islas. Vidal intenta no quemarse de cara a la guerra de verdad, la que tendrá lugar a la hora de escoger al presidente definitivo del PP y pasar página a la era de José Ramón Bauzá. En este sentido, el líder interino juega sus propias cartas.

Con todo, los críticos no piensan ceder en este aspecto, por lo que Isern sigue siendo el mejor posicionado para ir al Congreso, por el peso de este sector en el actual statu quo; Isern cuenta además con el aval de destacados miembros de la cúpula estatal, aunque Borrego también los tiene. Biel Company, que lidera al sector crítico, es plenamente consciente de que colocar al exalcalde en Madrid refuerza sus posibilidades de convertirse en el futuro presidente del PP balear, cuando se celebre el congreso extraordinario.

Aún quedan unas semanas para despejar la incógnita. Vidal recordó ayer que "todavía no está claro si las elecciones serán el 20 de diciembre o una semana antes, pero se supone que una de las dos fechas", por lo que la elección del candidato se producirá "a finales de octubre o la primera semana de noviembre", anunció. El órgano que debe avalar la propuesta es el comité electoral regional, que preside el exalcalde de Son Servera Damià Ripoll. El nombre se elevará entonces a la dirección estatal del PP, que tiene la última palabra.

Jaume, adjunto para la campaña

Según Vidal, ayer no se tocó este punto en la reunión del comité ejecutivo regional que se celebró por la tarde en la sede de Palma. Solo se eligió al equipo de campaña, cuyo coordinador adjunto será el exalcalde de Llucmajor, Joan Jaume. El nombre del responsable máximo lo designará personalmente el futuro candidato, para dejar de este modo que sea una persona de su confianza.

Más allá de la cuestión de nombres, una parte del PP se está volcando en la preparación de la conferencia política que la formación ha convocado para el próximo 10 de octubre, en un lugar aún por determinar. Vidal señaló ayer la importancia de este pequeño cónclave, de cara a que el PP vuelva a conectar con la sociedad balear: "El PP está aquí. Hemos pasado unas elecciones complicadas, pero ahora ponemos más ímpetu que nunca. Con el tiempo volveremos a ocupar el espacio sociopolítico" mayoritario, aventuró. Según Miquel Vidal, las reuniones territoriales que desde hace días están teniendo lugar con miembros y simpatizantes está sirviendo para que el PP "toque el pulso" de las necesidades ciudadanas y recupere la iniciativa política frente al Govern de izquierdas.

"Cada reunión tiene una media de 80 personas", celebró Vidal, quien apuntó que las conclusiones de las ponencias que se debatirán en la conferencia servirán como líneas maestras para la labor de oposición al Ejecutivo de Francina Armengol. También como guía para el programa electoral de la campaña de las generales.