El vicepresidente del Govern y conseller de Innovación y Turismo, Biel Barceló, dejó ayer claro en el Parlament que el Ejecutivo implantará la ecotasa el próximo año "con la ayuda del Gobierno del Estado o sin ella", ya que se trata de un impuesto "absolutamente necesario" que permitirá a largo plazo "mejorar la competitividad" de Balears y porque "es una demanda social de la mayoría ciudadana que ha hecho posible el cambio político" en las islas.

Barceló efectuó estas declaraciones en el transcurso de su comparecencia en comisión parlamentaria para explicar el programa de actuación de su Conselleria en materia de turismo. Precisó que los fondos recaudados se destinarán a la "reinversión en la mejora de las zonas turísticas", la preservación y recuperación del medio ambiente y del paisaje, la recuperación del patrimonio histórico, artístico y cultural y políticas de innovación.

La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) reaccionó de inmediato contra la decisión del Govern y sostuvo que la implantación del impuesto turístico supondrá "pérdidas millonarias para las empresas y para la economía de Balears". La presidenta de la FEHM, Inmaculada de Benito, confió en que la implantación de la ecotasa se realice "con el consenso empresarial, como había anunciado el Govern, y no a través de la imposición y sin tener en cuenta los criterios económicos, lastrando por tanto la competitividad del destino y de las empresas".

Según De Benito, si se pone en marcha el impuesto el próximo año el Govern "incumpliría" su promesa de "generar espacios de trabajo conjuntos y bajo el consenso". Tras recordar que "los contratos de 2016 están ya firmados", confió en reunirse próximamente con el Govern. "Las consecuencias en la economía de Balears pueden ser irreparables, con efectos sobre la inversión llevándola a su paralización, sobre el empleo, el bienestar y la riqueza", insistió la presidenta de la FEHM.

En su comparecencia, Barceló ya se había adelantado a las críticas y a la oposición de los hoteleros. "Pensar que a Balears nos resultaría perjudicial (la ecotasa) es demostrar una inexplicable falta de confianza en el producto turístico de nuestras islas; yo sí tengo absoluta confianza en la fortaleza de nuestro sector turístico", afirmó el vicepresidente del Govern.

Compromiso electoral

Barceló recordó que el impuesto turístico es "un compromiso electoral inequívoco" y que el Govern desea implantarlo desde "el máximo acuerdo posible", para lo cual "ya ha comenzado" el "debate". En este sentido, consideró que "a pesar de las discrepancias con aquellos que se oponen, hay un punto de encuentro que es la necesidad de mejorar la oferta turística y el territorio" de Balears.

Recordó que el impuesto turístico ya se aplica en "muchos lugares del mundo" sin que "haya tenido ningún tipo de efecto negativo minimamente reseñable, en todo caso al contrario", ya que por ejemplo en Cataluña ha aumentado el número de turistas. "Las personas que nos visitan nos ayudarán a preservar este paraíso que es nuestro archipiélago y serán conscientes, lo que mejorará su compromiso con nuestras islas", opinó.

En su comparecencia, destacó entre los problemas de la economía balear el que "los beneficios de la actividad económica, y especialmente de la actividad turística, quedan en unas pocas manos y no se genera prosperidad compartida". Apostó por redefinir el modelo económico en general y el turístico en particular con una" estrategia basada" en la reactivación del Consell Econòmic i Social (CES), reforzar el papel económico de la industria, la apuesta por la economía del conocimiento y las tecnologías innovadoras, la atención a autónomos y pimes, el apoyo a la economía social y solidaria y "hacer del turismo una fuente de prosperidad compartida".