El Govern del PSIB y Més, según sus propios cálculos, destinará en un año 9,18 millones de euros a retribuir a todos los cargos de designación política, mientras que el anterior ejecutivo tenía un coste salarial bruto de 9,03 millones, lo que representa un aumento del 1,6%.

El ejecutivo que preside Francina Armengol, que cuenta con una conselleria y diez direcciones generales más que el anterior gabinete, ha hecho público hoy un informe comparativo sobre el coste salarial para hacer frente a las críticas del PP, que sitúa la diferencia en unos 4 millones de euros, mientras que el cálculo de la coalición de izquierdas es de 144.933,5 euros anuales más.

El Govern ha puesto el acento además en que en su estimación del coste de todos los gestores nombrados por decisión política ha contabilizado a 31 altos cargos de empresas públicas que aún están pendientes de nombramiento, por el sobrecoste real podría ser menor, han indicado fuentes del ejecutivo.

El Govern de PSIB y Més tiene 78 consellers, secretarios generales y directores generales, frente a los 67 con que acabó la pasada legislatura. El personal de confianza de los máximos responsables de los distintos departamentos asciende a 47 trabajadores, 7 menos, y los gestores del sector público (nombrados o previstos) son 57, 4 menos. En total, ambos ejecutivos tienen 182 cargos políticos.

El balance difundido también recoge el cálculo del coste medio en altos cargos de las conselleries, que asciende al inicio de este mandato a 586.509 euros frente a los 608.740 del Govern del PP, lo que supone una reducción del 3,6 %.

El conseller de Presidencia, Marc Pons, ha empleado hoy estos datos para defender desde la tribuna del Parlament la política de nombramientos de su gabinete, objeto de una interpelación por parte del PP, mientras que la presidenta Armengol, ante una pregunta crítica de la portavoz del PP Marga Prohens, que ha cifrado el sobrecoste en 4 millones de euros, ha acusado al principal grupo de la oposición de tergiversar los datos.