La presidenta del Govern, Francina Armengol, considera que "no es muy explicable" que los promotores de la huelga indefinida de educación mantengan la convocatoria cuando su ejecutivo negocia sus demandas desde que tomó posesión. "La primera decisión que tomé fue abrir las puertas del Consolat a la comunidad educativa, que no había estado aquí en cuatro años, y el conseller de Educación ha reunido constantemente con toda la comunidad", subraya. Para la presidenta no tiene sentido que se mantenga la amenaza ante un Govern "en contacto directo con la comunidad educativa para solucionar los problemas" y que ha establecido "un calendario de retorno de derechos para los docentes y para el derecho a una buena educación de los alumnos, que es más importante".

La presidenta balear pidió además al jefe del Gobierno central, Mariano Rajoy, y al presidente de la Generalitat catalana, Artur Mas, que abandonen la "política de enfrentamiento" y aborden un diálogo que permita desbloquear el conflicto. Según Armengol, "pase lo que pase el 27 de septiembre" en las autonómicas catalanas "y pase lo que pase en las elecciones en España, habrá que dialogar".

Armengol considera que "el presidente catalán está planteando una mala solución para Cataluña, para España y para Europa", al abogar por "una declaración unilateral de independencia". "Cataluña dice unas cosas con las que estoy radicalmente a favor en temas de infrafinanciación y nosotros las padecemos el doble", recalca Armengol, que aboga por "entender y respetar las diferencias culturales, las identidades, los sentimientos y las necesidades" y apuesta por abordarlas mediante "una reforma constitucional y comenzar a trabajar en un estado federal donde haya un trato diferente a lo que ha habido en los últimos años".