Las continuas olas de calor y las últimas lluvias en el litoral Mediterráneo han propiciado un clima cálido y húmedo con abundantes concentraciones de agua estancada, condiciones que colaboran en la aparición y propagación del mosquito tigre en comunidades como Baleares.

Su llegada ya ha puesto en alerta a las autoridades competentes, indica la empresa Anticimex España sobre esta especie de origen asiático y considerada una de las cien invasoras más dañinas del mundo, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

En este sentido, amenaza un año más la salud pública y la actividad turística de pueblos y ciudades de Cataluña, Comunidad Valenciana, Región de Murcia, Andalucía y Baleares.

"El mosquito tigre, además de las ya conocidas reacciones cutáneas y comezones, puede transmitir una serie de enfermedades que abarca desde la leishmaniosis hasta el paludismo o la fiebre amarilla, aunque afortunadamente en España no se han dado estos casos", comenta el director técnico de la empresa indicada, Jordi Tapias.

El insecto vive en la vegetación de los alrededores, se reproduce en pequeñas cantidades de agua y cualquier recipiente que contenga este líquido estancado puede representar un foco de cría.