Podría haber muerto asfixiada por una bolsa de plástico, pero el destino quiso que una tortuga boba se salvara de tan cruel final al ser rescatada por la tripulación de un barco que navegaba por aguas mallorquinas.

El rescate de la tortuga, que tenía enredada entre sus aletas un saco de plástico, y más de 60 centímetros de ese mismo material cubriendo su abdomen, quedó documentado en un vídeo publicado en las redes sociales, donde muchos han aplaudido el gesto del grupo de jóvenes.

"Determinación y ganas de poner nuestro granito de arena hicieron posible capturarla antes de querer desaparecer hacia las profundidades. Un acto muy gratificante y cuanto menos emocionante y muy satisfactorio para todos los miembros de la excursión de ayer", manifestaron los protagonistas del rescate que dio una nueva vida al animal, víctima de la sopa de plástico que contamina el Mediterráneo.

Los navegantes destacan que fue "un trabajo de equipo" en el que Andreu Vidal, patrón de la embarcación, se lanzó al rescate de la tortuga después de que Hunter Austin la divisara, mientras que Marçal Gutiérrez Balle se ocupó de quitarle la basura para devolverla al mar. Todo quedó registrado en imágenes gracias al vídeo realizado por Nick Schmitz.

El rescat.Una feina d,equip: Hunter Austin la veu, n,Andreu Vidal es llança a rescatar-la, amb en Marçal Gutierrez Balle li treuen la porqueria, en Nick Schmitz filma.#turtlerescuePosted by Mies Balle Monjo on Miércoles, 5 de agosto de 2015