El sábado se agotaron los billetes en la mayoría de los cajeros automáticos del centro de Palma. Bastó un nubarrón de tormenta para que el overbooking de turistas que vive la isla barriera Ciutat. Comercios llenos, terrazas a rebosar y cajeros automáticos vacíos. Euros cambiando de manos. Muchos euros. Para que luego digan que los turistas no gastan. La imagen no es más que la constatación de que Mallorca está más atestada que nunca. No sus hoteles, que tienen cifras de ocupación muy elevadas, pero disponen de plazas. La clave es el alquiler turístico, fundamentalmente ilegalizada por el anterior Govern, que abarrota la isla hasta niveles máximo. Lo reflejan los números de récord del aeropuerto, aunque se puede ver en avalanchas de visitantes como la del sábado en Palma,cuando la cola para entrar al párking del Parc de la Mar comenzaba en la gasolinera del final de avenidas.

La moda Mallorca se refleja también en las cifras de reservas de los principales intermediarios de viajes del mundo. Uno de ellos, el más grande, es mallorquín. Se llama HotelBeds y es el mayor banco de camas global. Ayer ofrecían datos de la evolución mundial del sector, y la conclusión apunta a lleno hasta reventar en Mallorca (cualquier día, reventón literal). Según HotelBeds, la isla es el paraíso vacacional más demandado del planeta. "Destrona a Orlando como el destino más solicitado a nivel global. A Mallorca le siguen Barcelona, Tenerife, Benidorm y la Costa del Sol como los cinco principales destinos preferidos de los turistas en España", documentan en HotelBeds.

Así que Mallorca ya vende más que Orlando (Estados Unidos) y su Disney World. Los turistas llenan a la vez hoteles y apartamentos. De hecho, no hay apartamentos más repletos. Ya era así en junio, cuando según el Instituto Nacional de Estadística los alquileres vacacionales de la isla alcanzaron la mayor ocupación de España: un 55,8% de las plazas y un 72% de los apartamentos, cifras a las que solo se acerca, y en fin de semana, la Costa del Sol. Dentro del mapa mallorquín, Alcúdia y Calvià destacan como las localidades con menos sitio libre en los edificios y casas dedicados al alquiler de habitaciones y camas a viajeros.

Lleno hasta octubre

También se nota movimiento en la oferta complementaria, dicen en HotelBeds, que detecta un "auge" en la demanda de actividades. Excursiones, tours urbanos, visitas a parques temáticos y oferta de aventuras y experiencias están entre lo más solicitado, abundan en la empresa, cuya base de datos incluye 75.000 hoteles en 180 países, en los que vendió el año pasado 22,5 millones de noches de hotel, para lucir una facturación de 2.300 millones de euros.

Las previsiones de agencias y touroperadores auguran que el abarrote durará hasta el final de septiembre, porque la demanda, dicen, también es alta en la segunda quincena de septiembre, a la que cada año se llega con más fuerza. Mercados como el británico, el alemán, el francés, y el italiano están empujando con más fuerza que el año pasado. Y de allí proceden la mayoría de los turistas de verano. De allí y de España, mercado en el que el crecimiento ronda el 15%. Mallorca lo nota especialmente con la llegada de catalanes. Ellos copan el 30% de las reservas españolas en Mallorca, más o menos las mismas que hacen los propios mallorquines en su isla en verano. La cartera de clientes se completa con madrileños y levantinos, que se reparten otro 20% de las visitas nacionales a la isla, según datos del INE.

Con todo, Mallorca vende más Mickey Mouse, el Rey León o Buzz Lightyear. Si es que el parque de atracciones no revienta de éxito.