La presidenta del Govern, Francina Armengol, y el vicepresidente, Biel Barceló, exigen que se elimine su nombre del organigrama de miembros del patronato y del comité de seguimiento de la Fundación Kovacs. Ni Armengol ni Barceló autorizaron a la entidad que dispusiera de su nombre. Los servicios jurídicos del Consolat están estudiando el tema, ante la petición expresa de la presidenta y del vicepresidente de eliminar su presencia "cuando antes" del organigrama de la fundación, que recibe pacientes de la sanidad pública para someterlos a su controvertida terapia de grapas. Una entidad que durante los últimos años ha recibido millones de euros en conciertos y subvenciones del Ejecutivo de Bauzá.

Francina Armengol se enteró ayer por la mañana por este periódico de que figuraba como miembro del patronato de la Fundación Kovacs. Ante su sorpresa mayúscula pidió a los servicios jurídicos que le indicaran el motivo. Al explicarle que se trata de una presencia de facto al ser elegida presidencia del Govern, la jefa del Ejecutivo ordenó una relación de las entidades y fundaciones en que figura su nombre sin su expresa autorización, tal y como ha ocurrido con Kovacs. Armengol dejó claro que no quiere estar "en una entidad privada" sin su consentimiento previo. Incluso, la presidenta del Govern revisó las autorizaciones otorgadas por ella en las últimas semanas para averiguar si había dado permiso a Kovacs para utilizar su nombre. Desde su llegada al Consolat, hace ahora un mes, en "ningún momento" dio su consentimiento a la Fundación Kovacs para incluirla en el patronato.

El caso de Biel Barceló es similar. El vicepresidente también conoció que figura como miembro del comité de seguimiento de la fundación de medicina alternativa por este periódico. Barceló emitió ayer un tuit claro y contundente: "Mi presencia en la Fundación Kovacs, que hoy revela Diario de Mallorca, se ha hecho sin consultarme y pediré que me eliminen de ella". El vicepresidente del Govern tiene claro que su nombre debe desaparecer "cuanto antes" del organigrama de la entidad.

Este periódico adelantó ayer que Armengol y Barceló figuraban en los órganos de gobierno de la fundación de medicina alternativa que preside el doctor Francisco Kovacs, una entidad que ha recibido millones de euros en conciertos y subvenciones por parte del Govern Bauzá en los últimos cuatro años. Hay que recordar que tanto la presidenta del Govern como el vicepresidente habían dejado claro antes de las elecciones su postura contraria al mantenimiento de los vínculos económicos en una fundación que incluso fue rechazada por el Gobierno central en tiempos de José María Aznar. La presidenta del Govern dijo durante campaña electoral que "hay prioridades más importantes para la salud de los ciudadanos".

Revisión del contrato

En la rueda de prensa posterior al Consell de Govern, el conseller de presidencia y portavoz del Ejecutivo, Marc Pons, se refirió en los mismos términos que Armengol durante la campaña: para el servicio púbico de salud la terapia de grapas no es un "tema prioritario". Por consiguiente, añadió Pons, en noviembre se revisará el convenio suscrito por el Ejecutivo de José Ramón Bauzá. Esta fecha es clave, ya que concluye el contrato que vincula al Govern con la Fundación Kovacs para que la sanidad pública le desvíe pacientes para someterse a la Neurorreflejoterapia, también conocida como terapia de grapas. Las intenciones del Govern son claras en este aspecto y consideran que el dinero que se destina a la Fundación Kovacs tiene otras finalidades más prioritarias en la sanidad pública de las islas.

Los servicios jurídicos del Govern están estudiando la fórmula para que los nombres de la presidenta y del vicepresidente del Govern dejen de figurar en el organigrama "cuando antes".

En cualquier caso, Marc Pons dejó claro que, en el momento de revisar los vínculos económicos con Kovacs, se eliminará que la entidad pueda seguir utilizando los nombres de miembros de Govern en el organigrama de la fundación privada sin previa autorización. Todo ello, pese a que desde el Govern ya tienen decidido eliminar o recortar al máximo sus aportaciones a esta fundación de medicina alternativa.

Además de Armengol, también figura como miembro del patronato el presidente del Gobierno del Principado de Asturias, Javier Fernández. Asturias y Balears son las dos únicas comunidades con convenio económico con la Fundación Kovacs. Cataluña ofrece la terapia de grapas en una franja muy reducida de sus pacientes.

El Govern Bauzá tenía una fluida relación con la Fundación Kovacs. El presidente de la entidad, Francisco Kovacs, estuvo presente en la manifestación de una trentena de personas que se organizó desde el Consolat a favor del TIL, poco después de que el 29 de septiembre de 2013 salieran a la calle 100.000 personas en contra de la política educativa de Bauzá. Asimismo, fue una de las personas que participaron en las comidas y excursiones en el parque nacional de Cabrera. De hecho, el jefe de gabinete del expresident José Ramón Bauzá, Javier Fons, había sido anteriormente responsable de prensa de Kovacs.

Tajante dictamen del Consultiu

El Consell Consultiu, presidido por el prestigioso jurista Rafael Perera, emitió un demoledor informe contra los pagos del Govern Bauzá a la Fundación Kovacs. Entre otras cosas, el dictamen del alto órgano consultivo de la comunidad autónoma califica de "irregular" el abono de 632,000 euros a la Fundación Kovacs por parte del Govern Bauzá. El Consultiu alegaba que el contrato con Kovacs se realizó por parte del Govern de José Ramón Bauzá "sin seguir el procedimiento legalmente establecido" de publicidad y concurrencia.

El acuerdo entre el Ejecutivo autonómico y la fundación de medicina alternativa había concluido a finales de 2012. Sin embargo, el Ib-Salut siguió enviando pacientes a la terapia de grapas de Kovacs desde octubre de ese año y hasta septiembre de 2013 sin subscribir un nuevo contrato y por el procedimiento de urgencia. Una vía administrativa que, según el Consultiu, solo se deben utilizar en casos de extrema necesidad. Los tratamientos durante este periodo de tiempo ascendieron a los mencionados 632.050 euros.

El alto órgano jurídico concluyó su dictamen de abril del pasado año aseverando: "Este Consell Consultiu debe concluir que estas actuaciones del Servei de Salut de les Illes Balears, que consisten en las adjudicaciones sin procedimiento y sin dotación presupuestaria de las prestaciones de la Fundación Kovacs, son actos -tácitos- nulos de pleno derecho".