-La Assemblea de Docents ya le ha criticado por sus medidas contra la LOMCE. ¿Estará más tranquilo cuándo retiren la convocatoria de huelga?
-Las críticas no me han sorprendido, tanto las de de la Assemblea como las de la asociación PLIS. El problema es que la LOMCE es una ley orgánica de obligado cumplimiento y minimizar sus efectos negativos es lo único que se puede hacer, diga lo que diga la Assemblea o quien sea. Derogaremos los currículos tras un trabajo tranquilo y los trámites legales.
-¿Sí o sí se ha de aplicar?
-Sí, este debate no se ha de hacer, la derogación de la LOMCE solo tendrá lugar con una nueva correlación de fuerzas políticas en el Gobierno o si el Tribunal Constitucional decide que hay puntos anticonstitucionales. Nosotros trabajaremos para hacer unos currículums mejores, modernos y con las asignaturas que antes quedaban marginadas como Tecnología, Plástica y Música y para que el profesorado no se vea afectado. Ya puedo anunciar que en Secundaria habrá más profesores.
-¿Cuándo dijo que dialogarían pero no serían prisioneros de nadie pensaba en la Assemblea?
-Ser prisionero de alguien es un suicidio político. Seremos prisioneros del diálogo, hablaremos hasta la extenuación y con todo el mundo, incluso con PLIS. No tengo ningún problema en recibir, eso sí, estrictamente lo que es comunidad educativa, otras cosas no.
-¿Se refiere al Círculo Balears?
-Yo entiendo por comunidad educativa profesores, asociaciones de padres, directores... Lo que no es eso tendrán otro canal, pero esto es la conselleria de Educación y Universidad. Hablaré para resolver problemas y para cerrar un pacto por la educación. Partiremos del documento de Illes per un Pacte, pero también se tendrán en cuenta otros, como el del STEI-i. Queremos las aportaciones de todos, de un lado y otro. Una vez cerrado el pacto social se llevará al Parlament para cerrar uno político, que serviría de base para un ley educativa balear."No me sorprenden las críticas, pero diga lo que diga la Assemblea, la LOMCE se ha de cumplir"
-¿Fichar a representantes de la marea verde es un intento de calmarla?
-No, la marea verde es tan amplia y diversa que era difícil no fichar a alguien de la marea verde. No ha sido un planteamiento político. Son profesionales que podían dar respuesta a las necesidades, que saben del tema y comparten el planteamiento de este gobierno de izquierdas.
-Crea un dirección general de Comunidad Educativa y pone al frente a un representante de las familias, algo muy novedoso. ¿Por qué?
-Seguramente sea la primera vez. Hay muchas razones, este es un gobierno de coalición. Desde la óptica del diálogo creo básico tener la perspectiva de los padres. Educación es un tema complejo, hay que contrastar los puntos de vista.
-¿Sumar al equipo a Jaume March, director expedientado la anterior legislatura, es revanchismo, como se ha dicho?
-Es una persona competente, trabajadora y que tiene una experiencia de muchos años al frente de un instituto con muy buenos resultados. Nosotros no estamos aquí para hacer revanchas.
"Mantendremos la libre elección de primera lengua si la ley fija que ha de ofrecerse"
-Han llegado a Conselleria muchos directores. ¿Este colectivo debe tener más poder en el proceso que quiere impulsar de dar más autonomía a los centros?
-No es solo dar poder a los directores, es a los centros y también, a través de un decreto de participación y bordeando la LOMCE, a los Consejos Escolares. Queremos dar poder a los centros, que tengan más capacidad organizativa, pedagógica, económica. Que sean más autónomos, pero también evaluados según sus resultados.
-¿Qué modelo lingüístico propone?
-Partiendo del Decret de Mínims, uno que integre todos los modelos que ya existen en las islas: desde centros que hagan inmersión a otros que no la hagan. Daremos flexibilidad para que cada uno diseñe su proyecto según su realidad, recursos, tradición histórica alumnado... Luego cada modelo será evaluado, a ver si los resultados en las competencias en castellano, catalán e inglés han mejorado. En cuanto a la tercera lengua, potenciaremos la enseñanza de inglés porque hay algo que está fallando, y sólo después potenciar las actividades en inglés. Eso sí, todo lo que ya funcione ahora, como Secciones Europeas, queremos que continúe.
-¿Y si un centro lo hace todo en catalán y se demuestra que los resultados en castellano son más bajos (o al revés) se les hará cambiar el modelo?
-Sí, lo importante es que los objetivos se cumplan y que cada centro demuestre que su modelo funcione. Pero no se puede hacer un modelo uniforme para todas las Balears, hay mucha pluralidad.
-¿Cree que PP o Ciudadanos aceptaría ese modelo lingüístico a la hora de firmar un pacto?
-La lengua está claro que es un tema importante, pero me molesta que sea el único del debate educativo, como ha pasado con el TIL. Trabajaré para que el pacto político sea inclusivo y que fije unos mínimos intocables, como el Decret de Mínims: luego cada partido fijaría sus máximos. Recuerdo que el Decret de Mínims, la 'orden Rotger' y la ley de Normalización Lingüística son normas impulsadas por el PP con el consenso de la oposición y la sociedad civil. El consenso se ha roto ahora. El PP ya hará su reflexión. Ese tema es muy sensible y puede dar votos, pero yo lo quiero plantear desde una perspectiva pedagógica.
"En Balears hay pluralidad y no se puede hacer un proyecto lingüístico uniforme"
-¿Cómo proceder si una o dos familias no están de acuerdo con el proyecto lingüístico del centro?
-Se harán con el consenso de la comunidad educativa y los derechos de los padres se han de respetar. Pero no estoy de acuerdo en que en un mismo centro haya dos líneas en temas de lengua. Lo interesante es que haya variedad de proyectos y todos los padres puedan encontrar uno con el que sentirse reflejado.
-¿Mantendrá la libre elección de primera lengua?
-Si la ley fija que ha de ser así, se mantendrá. Aunque ya hemos visto los porcentajes.
-¿Qué líneas prioritarias tiene para la Universitat?
-Solo tenemos una universidad y es buena, y, como todas, necesita reformas para encarar mejor el siglo XXI, y no las de este Gobierno. Queremos firmar un gran pacto con la UIB sobre infraestructuras, financiación, titulaciones, investigación...
-¿Quitará el concierto a los colegios del Parc Bit vinculados al Opus Dei?
-A mí personalmente las escuelas que segregan por sexo no me gustan y estamos revisando la situación jurídica, pero hay una sentencia que les reconoce el derecho y la cumpliremos. Por otro lado, la LOMCE da apoyo a los centros que segregan por sexo. Ahora bien, nosotros entendemos la concertación como un servicio público, que ha de responder a necesidades de escolarización y queremos tener un debate serio sobre el sector para tener un mapa racional. Me parece un buen instrumento y en Balears representa a más del 35%: es una realidad que está aquí y sobre la que hemos de llegar a un acuerdo.
-¿Tendrán vacaciones?
-Poca cosa. En agosto esta Conselleria estará a pleno rendimiento. Somos un equipo muy ilusionado y cohesionado, dispuesto a trabajar por la educación y a hablar, a explicar lo que hacemos y también lo que no podamos hacer y porqué. Aquí todos creemos profundamente en la educación y nos gustaría que toda la sociedad creyese más.
-El conflicto de la legislatura pasada situó a la educación en el centro del debate
-Sí, y además ha derivado en una comunidad educativa que ha sabido responder con una propuesta mayoritaria y en positivo, como es Illes per un Pacte, algo que históricamente se ha de valorar. La conselleria quiere asumir esa energía positiva y transformarlo en políticas. Me gustaría hablar en positivo. ¿Habrá problemas? Sí. No concibo una situación sin conflicto, siempre habrá en educación, pero queremos que tengan solución, resolverlos de otra manera, hablando y diciendo las cosas claras, sin cerrarse en banda y, en el caso de querer cerrar un pacto, sabiendo ceder un poco.
