A falta de la cuota ibicenca para ocupar la cartera de Territorio, Energía y Movilidad, que se decidirá el miércoles como muy tarde, el Govern de Francina Armengol ya tiene alineación titular y suma muchos más altos cargos. El organigrama pactado hasta el día de ayer incluye diez conselleries (una más que el Govern Bauzá) y 43 direcciones generales (14 más respecto al Ejecutivo del PP). Además, se inventarán la figura del viceconseller -inédita hasta la fecha en Balears- para la Conselleria de Trabajo, en la que se integra Economía como dirección general.

Tras la presidenta del Ejecutivo, Biel Barceló será la cara más destacada del Govern. El líder de Més se hará cargo de la vicepresidencia y de una de las novedades del nuevo Govern: la todopoderosa Conselleria de Investigación, Innovación y Turismo, que además se hará cargo directamente de IB3. La nueva supercartera tendrá un total de cinco direcciones generales. Una de ellas será la de Turismo, por primera vez rebajada de categoría en contra de los deseos del sector, que prefería que continuara siendo una conselleria independiente. Esta nueva dirección general será la encargada de diseñar la ecotasa.

Por su parte, Marc Pons, del PSOE, será el conseller de Presidencia, con tres direcciones generales a su cargo: Coordinación del Govern, Relaciones con el Parlament, y Relaciones Institucionales y Acción Exterior. Y se ocupará organismos como el Institut Balear de la Dona, la Fundació Santuari de Lluc o el Consorci Serra de Tramuntana.

Martí March, también del PSOE, será el conseller de Educación, cartera ahora desligada de Cultura y que tendrá como primera misión derogar el TIL. Tendrá cinco direcciones generales: Planificación e Infraestructuras; Ordenación, Innovación y Formación Profesional; Universidad; Educación, y Personal Docente.

Patricia Gómez, del PSOE, se hará cargo de la conselleria de Salud, con tres direcciones generales --Salud Pública, Planificación y Evaluación- y trasatlánticos como el Servei de Salud, siempre necesitado de más presupuesto y personal. Si se cumplen las previsiones, Gómez nombrará a su marido, Juli Fuster, director general del IB-Salut, lo que sería una de las designaciones más insólitas de la democracia en Balears.

Iago Negueruela, también del PSOE, se convertirá en conseller de Trabajo, Comercio e Industria, una cartera con cinco direcciones generales que incluye las competencias de la antigua Conselleria de Economía en una de ellas y que además tendrá la figura -con competencias todavía por definir- de un viceconseller.

Catalina Cladera, del PSOE, será la consellera de Hacienda y Administraciones Públicas. Administrará cuatro direcciones generales. Por su parte, Fina Santiago, de Més, será consellera de Asuntos Sociales y Cooperación y a la vez portavoz del Govern. Incluirá cuatro directores generales.

Esperança Camps gestionará otra de las carteras recién creadas por el nuevo Govern: Participación, Transparencia y Cultura. Sus cinco direcciones generales son un machihembrado de competencias: deportes, cultura, consumo, política lingüística y transparencia (con tareas aún por definir). Además, gestionará organismos tan diversos como sus propias áreas de mando. Vicenç Vidal, de Més, será el conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca y tendrá cuatro direcctores generales.

Falta por poner nombre al futuro conseller de Territorio, Energía y Movilidad, que corresponde a la cuota ibicenca del PSOE. Según fuentes de los socialistas, se han puesto varios nombres sobre la mesa y se está a la espera de que Armengol acabe el debate de investidura para decidirlo entre hoy o mañana. Pilar Costa explicó que "se está intentando buscar el mejor perfil", pero no quiso detallar los nombres que se están barajando.

Otras fuentes del PSOE indicaron que para el cargo han sonado el expresidente del Consell, Xico Tarrés; la exalcaldesa de Eivissa, Lurdes Costa, o el expresidente de Paradores, Antoni Costa. Todos ellos han sido descartados por sus situaciones judiciales o personales (Tarrés y Costa están imputados). Otro de los nombres que ha sonado, aunque parece que finalmente no ha llegado a estar sobre la mesa es el exconcejal de Vivienda de Eivissa vila, Marc Costa, según informa Claudia Roig.