PSOE, Més y Podemos han acordado hoy la devolución de las competencias turísticas y de transporte al Consell de Mallorca y reclamar las inversiones estatutarias que le corresponden, mientras esperan comenzar a hablar del organigrama de la institución a partir de la próxima semana.

Los cabezas de lista al Consell de Mallorca Francesc Miralles (PSIB-PSOE), Miquel Ensenyat (Més) y Jesús Jurado (Podemos) han llevado a cabo hoy su segunda reunión para definir las líneas programáticas de lo que será el futuro Consell de Mallorca.

Los representantes han avanzado hoy en la financiación y competencias del Consell de Mallorca, con el fin de que se le devuelvan todas las que determina el Estatuto de Autonomía.

En opinión de Miralles, la ley de financiación de los consells insulars aprobada en la legislatura que termina "es insuficiente", por lo que los tres partidos que pretenden gobernar la institución mallorquina consideran necesario reclamar las inversiones estatutarias que afectan sus competencias, con el fin de desarrollarlas, en especial las culturales y paisajísticas.

Los tres partidos quieren luchar "fuerte" por el traspaso de competencias y la financiación del Consell de Mallorca, ha precisado Jurado, quien ha detallado que hoy se han abordado las de transporte, ordenación y promoción turística, que es "importancia capital" para todos, así como las de museos, agricultura, ganadería y pesca.

Según Ensenyat, "se trata de repensar" el Consell de Mallorca para que pase que pase de ser una institución "de tercera regional a segunda división", ya que "siempre ha sido una administración residuo, el vertedero del Govern", con lo que el objetivo es que convertirlo en un organismo "fuerte y especialmente cerca de los ciudadanos".

Los tres han destacado que primero están hablando de "programa y no de personas", no "por un capricho" sino porque consideran que es la forma adecuada de hacer las cosas.

"No estamos aquí para ocupar sillas ni instituciones, los objetivos son los problemas de los ciudadanos, y cómo las administraciones deben ser útiles en dar soluciones a estos problemas", ha resaltado el representante de Més.

Todos han destacado una vez más el buen ambiente que existe entre ellos y consideran que no se encontrarán con lo mismos inconvenientes a la hora de hablar de organigrama que sí tienen en el Ayuntamiento de Palma y en el Parlament.

Miralles cree que "no habrá ningún problema" entre los tres partidos a la hora de formar el gobierno insular, ya que el "espíritu" es el de colaboración para llegar a "un acuerdo para gobernar las instituciones" desde "la confianza y el diálogo".

Por su parte, Jurado ha dejado claro que Podemos "no veta a nadie" para la presidencia del Consell de Mallorca, pero ha incidido en que la gente de la formación es la que decide ya que los representantes elegidos solo trasladan sus "ideas".

En opinión de Ensenyat, "sí será más fácil pactar un organigrama" porque van bien de tiempo al tener margen para la constitución del Consell hasta el 4 de julio, con lo que no están presionados por la premura ni los medios.