­Más de 5.500 profesionales de enfermería de Balears estaban llamados hoy a votar al presidente de su colegio profesional (COIBA), pero los comicios se anularon ayer después de que Andrés Buades, que se enfrentaba a la actual presidenta, Rosa María Hernández, retirara su candidatura al entender que Miguel Reynés es el "legítimo presidente" del colegio, como éste mismo se definió también.

Tras la retirada de Buades, se convocó una reunón de urgencia de la mesa electoral que, a las diez y media de la noche, aprobaba la proclamación directa como presidenta de Hernández. Poco antes de conocerse este hecho, Reynés enviaba a los medios un comunicado firmando como presidente del COIBA y criticando a Hernández y su equipo, acusándolos de irregularidades.

Los motivos apuntados por Buades para retirarse es que las elecciones no podían celebrarse en base a una resolución del Consejo General de Colegios Oficiales de Enfermería que presentó Miguel Reynés el pasado octubre en el COIB en la que se le nombraba como "legítimo presidente". Buades y Reynés entienden por ello que todas las las iniciativas presentadas por Hernández como presidenta de la Junta de Gobierno desde entonces no tienen validez, incluyendo la convocatoria de elecciones, que por tanto tachan de "pantomima".

Reynés perdió frente a Hernández en las elecciones de hace cuatro años y en su comunicado de ayer aseguraba que "no hay ninguna decisión judicial que paralice sus efectos de la resolución" y tachaba de "victimistas" a Hernández y su candidatura.

En su comunicado cuestiona además la victoria de ésta en 2010 "en unas elecciones llenas de irregularidades", el estado de las cuentas y la celebración de asambleas clandestinas a lo que la aludida respondió que no ha habido ningún ocultismo, que las cuentas se pueden consultar en la web, que todas las asambleas han sido difundidas y que recogieron más de 1.200 firmas de colegiados para poder llevar a cabo los comicios.

Hernández indicó que Reynés tiene muy buena relación con Máximo González Jurado, actual presidente del Consejo General, con quien ella y su equipo se han mostrado muy críticos.

Con todo, el Colegio de Enfermería queda en una extraña situación, con Hernández proclamada como presidenta por la mesa electoral, mientras Reynés se define también como cabeza del órgano colegial; el "candidato no oficialista" a quien se la ha impedido "el ejercicio efectivo de sus cargos a los que tenían que haber accedido en el año 2010".