El fiscal superior de Balears, Bartolomé Barceló, defendió ayer en el Parlament, donde compareció para presentar la memoria de la fiscalía del año pasado (datos de 2013), la actitud de su subordinado Pedro Horrach al pedir la exculpación de la infanta Cristina en el caso Nóos. Según Barceló, "un fiscal está obligado a acusar y oponerse a una acusación si entiende que una persona (doña Cristina) es injustamente acusada".

La postura del ministerio público con relación a la acusación de la hermana del Rey fue suscitada por la diputada de Més Fina Santiago, que preguntó a Barceló si es excepcional que un fiscal pida el archivo para un acusado.

El número uno de la fiscalía admitió que no es una situación "habitual", pero señaló que "es posible" y "está en la Ley"

Según el compareciente en el Parlament, debemos huir de la figura del fiscal norteamericano, porque el fiscal español es distinto: "Tiene la obligación de acusar y de oponerse a la acusación cuando considera que no se ha cometido delito".

Barceló fue muy rotundo al descartar que Horrach en este caso "haya recibido instrucciones del fiscal general del Estado, del fiscal jefe de la fiscalía anticorrupción o de mí mismo".

"Ha actuado de acuerdo a su conciencia y a sus criterios profesionales, nadie le ha dado órdenes en un sentido u otro", apostilló.

El fiscal jefe también quiso dejar claro que "no hay contubernios, ni manos negras, ni conspiraciones en el caso Nóos".

"En un sumario de esa naturaleza, con el elevadísimo grado de atención que suscita y el gran número de partes personadas, es imposible pensar en una conspiración juez- fiscal-sala; no hay contubernios, es el Estado de Derecho el que impera", aclaró.

A preguntas de los periodistas, el jefe de la fiscalía rechazó que exista un veto para que Iñaki Urdangarin o la Infanta alcancen un pacto de conformidad con la acusación pública.

Sobre esos acuerdos que permiten a los acusados rebajas en sus penas a cambio de confesar los hechos, colaborar con los investigadores y cubrir las responsabilidades civiles, el fiscal superior se mostró de acuerdo. "Gracias a estos acuerdos se consiguen condenas y se agiliza la marcha de la Administración de Justicia al simplificar o hacer innecesarios los juicios: es bueno para el Estado de Derecho", remachó.

Corruptos sin fondos

Otro de los temas más comentados por Barceló en su intervención y en su diálogo con los grupos parlamentarios fue la lucha contra corrupción. Los portavoces de Més, PSOE y PP agradecieron a la fiscalía de Balears su trabajo en esta materia.

El fiscal superior se congratuló de que "la lucha contra la corrupción está dando resultados en cuanto a condenas", pero lamentó que "no se hayan podido recuperar los fondos públicos desviados".

El interviniente explicó que los corruptos no tienen bienes suficientes a su nombre para afrontar las condenas, con lo que los embargos y otras medidas cautelares resultan insuficientes. No obstante, Barceló apuntó que "se ha recuperado una cantidad importante, aunque no sabría dar una cifra exacta". El invitado al Parlament reclamó a las Administraciones Públicas un incremento de los mecanismos de control para evitar malversaciones de caudales. "Se tiene que saber dónde va cada euro (público), lo que evitaría nuevos casos de corrupción", abogó. Barceló también desgranó los problemas internos de la fiscalía ("necesitamos 4 ó 5 fiscales más en Balears) y una sección permanente de fiscales en Inca.