A las tres de la madrugada de ayer, con veinte horas de retraso, arribó al puerto de Palma el ferry Tenacia, de Trasmediterránea. El buque sufrió un golpe contra la bocana del puerto durante la maniobra para salir del puerto de Barcelona, que le produjo, según los testigos, "un agujero bastante grande". Fuentes de la compañía explicaron que el barco sufrió una avería eléctrica justo cuando atravesaba la bocana, lo que hizo que rozara un bloque de hormigón y se abriera una brecha, por lo que tuvo que volver a puerto para ser revisado.

El Tenacia, con 148 pasajeros a bordo, partió de Barcelona el viernes a las once de la noche. Tenía que llegar a Palma sobre las siete de la mañana del sábado. Sin embargo, a los pocos minutos de partir, cuando estaba a la altura de la bocana del puerto, sufrió un contratiempo que le obligó a dar marcha atrás. Algunos pasajeros refirieron posteriormente que sintieron un movimiento extraño, aunque no le dieron más importante. Muchos no se dieron cuenta de que habían vuelto a atracar hasta varias horas después.

Sobre las tres de la mañana les informaron por megafonía de que el buque había sufrido una avería que obligaba a posponer la salida hasta el mediodía, y ofrecieron a los pasajeros con billete de butaca la posibilidad de ir a un camarote a pasar la noche. La resolución de la avería se fue retrasando y el ferry no pudo salir hasta las siete de la tarde, con lo que no llegó a Palma hasta las tres de la madrugada de ayer, con veinte horas de retraso.

Algunos pasajeros explicaron ayer que habían visto cómo el barco golpeaba contra una roca durante la maniobra de salida, lo que le provocó un boquete "bastante grande" en el casco, que tuvo que ser reparado.

Un portavoz de Trasmediterránea confirmó ayer que el buque sufrió una avería en el sistema eléctrico justo durante la maniobra de salida. Según sus explicaciones, aunque esta avería pudo ser compensada por generadores alternativos, provocó que la embarcación se rozara con la bocana y sufriera una brecha en el casco. La fuente indicó que el agujero estaba "a un metro y medio por encima de la línea de agua", pero obligó al barco a regresar a puerto para ser sometido a una detenida revisión, que no finalizó hasta la tarde siguiente. El Tenacia tenía previsto ayer proseguir con normalidad con sus travesías.