"Padres, apartad el móvil, dejad de mirar Twitter y escuchad a los niños", pidió Maria Garrido, la Defensora del Menor, desde el Parlament: "Tienen mucho que decir". Y tanto. La sesión extraordinaria que celebró ayer la cámara con motivo del Día de la Infancia no dejó dudas sobre la capacidad de observación de los niños y de generar propuestas de mejora.
Los chavales reivindicaron ayer, en el tercer Congreso de la Infancia celebrado en Balears, su derecho a ser escuchados de la mejor manera posible: haciendo propuestas para mejorar su municipio y dando algún que otro suave tirón de orejas a los políticos en particular y a los adultos en general.
La presidenta del Parlament, Margalida Durán, les dio la bienvenida a "la casa de todos" y a continuación la consellera de Familia y Asuntos Sociales, Sandra Fernández, quiso garantizar a los chavales que su voz y su acción es importante y puso de ejemplo a Malala Yousafzai, premio Nobel de la Paz 2014 junto a Kailash Satyarthi. Raquel Pérez, presidenta de UNICEF en Balears, les aseguró "estar orgullosa" de ellos mientras que Garrido cerró el turno de los adultos recordando que son derechos fundamentales de los niños el participar, manifestar su opinión y a ser escuchados.
A continuación, el protagonismo pasó a los chavales que forman parte de los consejos de infancia de distintos municipios y que han estado trabajando en proyectos de acción bajo el epígrafe propuesto por UNICEF para que los jóvenes interioricen la fuerza del trabajo en equipo para cambiar las cosas: "Nos aliamos".
Participaron niños de consejos de infancia de Palma (del IES Jospe Sureda i Blanes), Eivissa, Santanyí, la Fundació S'Estel, Calvià-Àgora Portals, Santa Eulària des Riu, Maó, Ciutadella, Valldemossa (CEIP Nicolau Calafat) y Formentera. La regatista Maria Bover puso el colofón al turno infantil.
"Los cambios también dependen de nosotros el cambio", indicaron Marina y Mars, alumnos del Ágora Portals de Calvià de quinto de Primaria, que expusieron los objetivos marcados desde su consejo de infancia: ayudar a la ONG Mediterránea y mejorar la imagen de su municipio a nivel turístico: "La imagen de Magalluf se ha de cambiar", aseveró él. Para conseguir este último reto los chavales sugieren hacer un concurso infantil de fotografía para lograr las mejores imágenes del municipio y después exponerlas en diferentes espacios: "Para que se vean las cosas positivas". Van más alla y piden acción a las autoridades, proponiendo "más sanciones para la gente que consume alcohol y pone en peligro a los conductores", una "campaña contra esta problemática", además de "más controles a los locales de ocio". Ahí queda eso, conseller Jaime Martínez y alcalde Onieva.
Maria, Fátima y Madalina, representantes del consejo de Eivissa, también plantearon propuestas de cambio muy concretas al pedir más espacios de ocio para los adolescentes en su ciudad ya que "sólo hay un parque acuático y es pequeño y el cine acaba de cerrer". Pidieron salas de fiesta para menores de 18 años para ir a bailar, espacios naturales para ir a pasear y aumentar el horario de la biblioteca.
A los chicos no se les escapan los efectos de la crisis y fueron muchos los que ayer hicieron alusión a compañeros que tienen problemas para comprar el material escolar o simplemente para comer. Así lo subrayaron por ejemplo los representantes del IES Sureda i Blanes, que reivindicaron más becas, grupos de refuerzo y un sistema de reciclaje de libros de texto "más efectivo". Varios grupos coincidieron en pedir que se fomente la reutilización del material. A ver si además de escucharles, alguien les toma la palabra.
