El sindicato CSI-F ha pedido hoy la dimisión del secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, tras la decisión del juez de vigilancia penitenciaria de revocar el tercer grado al expresidente balear Jaume Matas, que le fue concedido para que tuviera un régimen de semilibertad.

En un comunicado, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios sostiene que Yuste tiene que dimitir después de la decisión judicial en contra de su criterio y por su "falta de apoyo a los profesionales de la Junta de Tratamiento de prisiones" que se mostraron en contra de su concesión.

El sindicato ha afirmado que el auto del juez evidencia que los técnicos de la Junta de Tratamiento que votaron por el segundo grado era la correcta y estaba ajustada a los postulados de las diferentes disciplinas científicas "defendibles desde la libertad de cátedra y con imparcialidad política y respeto a los derechos de todos los internos".

Tras defender el principio de igualdad hacia todos los internos presos, CSI-F ha exigido al secretario general de Instituciones Penitenciarias respeto a las decisiones sobre el tratamiento penitenciario, evitando la intromisión en las decisiones de los profesionales.

El sindicato ha explicado que los profesionales penitenciarios "no actúan desde la notoriedad o no de los reclusos", sino conforme "al interés público, la imparcialidad política y los principios deontológicos".