Al igual que hizo con las contrataciones de enfermeras en Atención Primaria, el sindicato CC OO ha puesto en conocimiento tanto del conseller de Salud, Martí Sansaloni, como del director general del IB-Salut, Miquel Tomàs, irregularidades en la contratación de urgencia de celadores y de auxiliares administrativos para los centros de salud en un periodo en que la bolsa única que iba a acabar con estas prácticas ya estaba plenamente en vigor.

Así, el sindicato ha podido contabilizar un total de 830 contratos sospechosos formalizados entre los pasados 1 de mayo y 31 de agosto -el acuerdo de bolsa única entre Administración y agentes sociales se cerró en el mes de marzo- a un total de 71 trabajadores. 518 de los contratos eran para desarrollar un trabajo eventual como auxiliar administrativo y los 312 restantes para cubrir una vacante de celador.

Asimismo, CC OO denunció que en numerosas ocasiones un mismo trabajador ha cubierto tanto un puesto de celador como de auxiliar administrativo, independientemente de la cualificación profesional de los aspirantes al contrato.

Catorce personas fuera de bolsa

Y del total de 71 "agraciados" con estos contratos de carácter eventual, al menos 14 de ellos no figuraban en ninguna bolsa de su categoría profesional al ser fichados para desempeñar estos trabajos.

Así, CC OO ha podido constatar que un trabajador que no figuraba en la bolsa de los celadores fue contratado hasta en veinte ocasiones entre los meses de mayo y agosto en un centro de salud perteneciente al sector de Llevant.

O el caso de un auxiliar administrativo que, pese a no figurar en los listados de su categoría profesional, acumuló hasta doce contratos en un centro de salud también perteneciente al sector de Llevant, circunstancia en la que se hallaría otro celador de esta misma zona que firmó hasta seis contratos pese a no figurar en ninguna bolsa a la que, en teoría, se debería haber recurrido para proceder a cubrir la vacante. O el caso del auxiliar administrativo que cubrió hasta 14 sustituciones en un centro de salud del sector de Migjorn pese a no estar registrado en el listado de su categoría.

Pero no solo se ha contratado a personas que no figuraban en las bolsas de trabajo, vulnerándose de esta manera los principios de igualdad, capacidad y mérito que deben regir todos los procesos de contratación en la Administración pública, sino que también se ha recurrido a personas que, por el elevado número que ocupaban en el listado, se antoja complicado que hubieran podido acceder a esos contratos si se hubiera seguido rigurosamente el orden de la bolsa de su categoría.

Entre estos últimos se encontraría un auxiliar administrativo que firmó 11 contratos pese a ocupar un lugar más allá del 1.500 en su bolsa (o, lo que es lo mismo, con unas 1.500 personas situadas en mejor posición para optar a este empleo) y que también se habría beneficiado de un contrato para sustituir a un celador pese a no figurar en el listado de esta última categoría profesional.

Manel García Beneyto, responsable de Comisiones Obreras, explicó que estas contrataciones de personas no incluidas en los listados oficiales de sus categorías profesionales así como los continuos saltos de bolsa que han detectado se estarían produciendo para cubrir vacantes de todo tipo. Así, el sindicalista lamentó que estas contrataciones irregulares también se darían para cubrir bajas temporales por permisos y vacaciones que, en teoría, han de solicitarse con una antelación que permitirían preverlas y contratar a los sustitutos de acuerdo a los listados en vigor.

Con respecto a las sustituciones para cubrir bajas inesperadas y sobrevenidas, circunstancias en las que la Administración se escuda para contratar sin atender a los listados -desde la Gerencia de Atención Primaria se asegura que resulta muy complicado cubrir una baja inesperada en una unidad básica de salud de Can Picafort para solo dos o tres días y que por eso siempre han de recurrir a las mismas personas, para poder garantizar así la continuidad asistencial-, García Beneyto propuso que se creen listas sectorizadas, ordenadas por el lugar que ocupan los candidatos en las bolsas de sus categorías, para atender estas bajas sobrevenidas.

"Que se hagan unos listados, siguiendo el riguroso orden que ocupan en las bolsas, de los trabajadores interesados en cubrir estas necesidades", propuso el sindicalista, que aseguró que así se evitarían muchas irregularidades y enchufismos que se estarían produciendo al abrigo de estas urgencias asistenciales.