„Lleva desde finales de los 90 al frente de Arca ¿Nadie le hace sombra para sustituirle?

„La verdad es que no. En la Junta somos catorce y, aunque parezca un tópico, lo cierto es que cualquiera de ellos podría ser presidente. Lo que pasa que al final funcionamos un poco por especialización. Cuando cada uno está cómodo con lo que hace es difícil que haya cambios. No cobramos. Ni siquiera cobro lo que pago en el túnel de Sóller cuando tengo que ir. Y este año que he tenido que ir varias veces.

„¿Por qué?

„Porque estamos en el grupo de la comisión Llimona. Nunca pensé que acabaría defendiendo una estatua o u panteón de un cementerio. La mayoría de la gente respeta los muertos, los cementerios. Y resulta que no, que a alguien de la familia Rullan Colom se le ha ocurrido que de una estatua de un cementerio podría hacer una copia y sacarla del cementerio sin permiso de nadie. En octubre de 2012 lo comunicó al ayuntamiento, que no contestó, de tal modo que quien calla, otorga. Se puede plantear que es para una restauración y que se devolverá, pero después te enteras de que se lo lleva a un marmolista, que no es especialista en restauración y que está haciendo una copia y te preguntas para qué. Como estamos acostumbrados a ese tipo de actitudes, lo que piensas es que acabarán dando el cambiazo. Le dije al conseller de Patrimonio insular, Joan Rotger, que en todos los municipios hay cementerios y que por lo tanto es un problema generalizado. En Sóller el cementerio viejo tiene ficha de catálogo local y estamos hablando de la única escultura funeraria de Llimona en Balears. Además es una escultura funeraria de primer orden. Hemos pedido al Ayuntamiento de Sóller que la recupere y dice que está con informes. Creo que estan intentando marear la perdiz.

„Cuando decía que están acostumbrados a este tipo de actitudes, ¿a qué se refiere?

„Estamos acostumbrados a que las administraciones siempre estén dando largas y contestando cuando quieren. Los alcaldes pueden quejarse de muchas cosas, como que no tienen dinero, pero como mínimo no actuan conforme a Derecho en estos temas. Para ellos no es una prioridad y lo meten en cajones para que pase el tiempo. En el caso de Sóller, estamos hablando de una pieza de primer orden. En Arca estamos acostumbrados a casos como Can Bibiloni, pero no te imaginas que pudiera pasar en un cementerio. Al final tienes que estar pendiente de todo, con muy pocos medios.

„Arca tiene un largo recorrido. Nació en 1987. ¿En qué situación está el patrimonio de Mallorca después de todos estos años?

„Esa es la pregunta del millón. Ahora tenemos problemas que no sospechábamos hace años. Ha aumentado la sensibilidad ciudadana y en muchos sitios hay gente que ya denuncia por su cuenta, lo que es positivo. Las administraciones, al menos a cara descubierta y de boquilla, reconocen el patrimonio como un activo para el municipio. Pero aún hay muchos municipios de Mallorca que no tienen catálogo de patrimonio cuando la Ley, que es de 1998, decía que en dos o tres años todos los municipios deberían tenerlos. Lo que es peor es la falta de actuación del Consell y la falta de colaboración del Govern.

„¿En qué sentido?

„Para el Govern el patrimonio y la cultura no existen. Dicen que eso es cosa de los consells insulars, pero el Govern hace presupuestos y gasto público y podría meter proyectos para inversiones estatutarias para mecenazgo. Si eres un Govern serio debe preocuparte todo lo que pasa.

„Al menos con las declaraciones de Bien de Interés Cultural se ha logrado una amplia protección.

„Sí, pero eso es para los bienes de primera división, por así decirlo, ante los cuales tampoco podemos bajar la guardia. Además, hay muchos bienes de interés cultural de segunda división que no logran una protección digna. Si no está en el catálogo municipal, el Consell debería incluirlos como bien insular catalogado, pero argumenta, por ejemplo, que no puedes catalogar todos los molinos de Mallorca o que esas cosas corresponden al municipio, que a su vez siempre tiene alguna excusa para no ponerlo en su catálogo en el caso de que lo tenga. Con estas batallas hemos perdido el edificio de la esquina de Avenida Argentina con Fábrica, por ejemplo, o el edificio de carabineros en la Colònia de Sant Jordi. Siempre hay un concejal atrevido o que pasa de todo y al final decide que no hay papel que lo impida y que venga la piqueta. Hemos ido al juzgado apelando a que si una institución como el Consell dice que algo tiene valores a proteger y otra institución como el ayuntamiento pone la piqueta se está destruyendo patrimonio, pero la Justicia penal tiene entre manos cosas que le parecen más importantes y además no tiene peritos. Son edificios sobre los que aún falta un poco de sensibilización y que la sociedad vea que también forman parte del patrimonio.

„¿Eso es lo que ocurre con Can Bibiloni? ¿La falta de sensibilización?

„Hacer entender a la gente que aquello vale la pena no es lo mismo que con un talaiot o una playa. Defendemos las fachadas de Can Bibiloni, de Bennàssar, porque es un edificio industrial de Palma, donde ya quedan pocos, está en un sitio inmejorable y permite intervenciones. Es difícil hacer que cale este mensaje. En otra ciudades se hacen cosas maravillosas con el patrimonio industrial. El Ayuntamiento de Barcelona está comprando antiguas fábricas como equipamientos, por ejemplo. Aquí en cambio, el Consell quiere vender el edificio de carreteras de las Avenidas para sacar dinero y el Teatro Principal tiene un proyecto para gastarse creo que 400.000 euros en comprar una nave en un polígono para guardar los decorados y material. Si tenemos edificios cercanos con gran capacidad, ¿no sería más lógico usarlos?.

„¿Con la crisis se ha deteriorado el patrimonio?

„La crisis te deja muy indefenso ante el patrimonio que necesita intervención urgente, como las Torres del Temple. También se ha paralizado alguna restauración. Pero por otro lado, la crisis evita esas grandes operaciones de especulación y compra venta que van al negocio puro y duro. Por ejemplo, si se hubiera hecho todo lo que pretendía Grande en sus mejores tiempos no hubiéramos dado abasto para proteger todo el patrimonio que quedaría en peligro. Al menos a este nivel se ha preservado, porque no hay dinero. Para el patrimonio la austeridad puede venir bien porque implica pocas reformas y mucha conservación y mantenimiento. O eso nos gustaría. Cuando hemos tenido las vacas gordas de grandes proyectos y palacios no solo entra la especulación sino que, además, hay algunos arquitectos que lo que les gusta es hacer un proyecto nuevo. ¿Qué queda por ejemplo de la mal llamada rehabilitación del nuevo edificio del Parlament? Vas ahí y recuerda a la entrada del colegio de Abogados o la del Centre Cultural Sa Nostra. Son proyectos que no pasarán a la historia, aunque queden bonitos el día que se inauguran. Cuando se va a ver estos edificios es para ver lo poco que ha quedado auténtico, original.

„¿El recorte de fondos públicos ha afectado a la conservación del patrimonio público?

„En muchos sitios se ha parado todo lo que era público . En las Torres del Temple, por ejemplo, no se han gastado ni un euro. En Can Weyler se han gastado 50.000 euros en esta legislatura para que no se diga nada. Había fondos del Gobierno central para proyectos de patrimonio, incluidos en el convenio de diciembre de 2010, que nunca hemos sabido que ha sido de ellos. Siempre se dice que en Balears estamos maltratados económicamente desde Madrid, pero estoy convencido de que si mañana llamara el ministro diciendo que tiene cinco millones de euros para proyectos de patrimonio público en Balears, se las verían y desearían para presentar los proyectos. No lo tienen preparado. No es un tema que se encuentre entre sus prioridades.

„¿Cuál ha sido la gran victoria de Arca en esta legislatura?

„La sentencia del TSJIB que ratifica la declaración de BIC del Jonquet. El Consell y el Ayuntamiento han jugado su papel, pero quienes se han batido el cobre fuimos el GOB, la Plataforma y Arca. Este tipo de temas son batallas de años. La sociedad civil sobrepasa las legislaturas. A veces a los políticos hay que recordarles que ellos en cuatro años quizá no estarán, pero el tema ciudadano con el Jonquet o Can Bibiloni sí seguirá con la sociedad civil.

„¿Y el gran fracaso?

„En esta legislatura creo que el gran fracaso ha sido no estar en la ponencia de patrimonio del Consell. Lo primero que hicieron al empezar la legislatura fue sacar a Arca de ella. Me dirá que no es culpa de Arca, sino de los políticos del Consell, pero también es cierto que al principio protestamos mucho y después lo dejamos estar. La próxima legislatura tendremos que empezar otra vez diciendo que si realmente se pretende decir que hay participación, habrá que incluirnos. No sé quién ganará las elecciones, aunque hay que dar por hecho que puede haber un cambio de gobierno, pero lo que es seguro es que cambiarán las personas que están al frente. El patrimonio no entiende de partidos. En todos los partidos hay personas formadas, con sensibilidad, que intentan favorecer la protección y personas a las que no les gusta. A veces me preocupa más, en lo que se refiere a patrimonio, quién me ponen al frente de este ámbito que el partido que gana. En todos los partidos hemos tenido contrarios y aliados. Esto es así.

„¿Con Can Bibiloni tiene esperanzas?

„Estamos haciendo todo lo que podemos y sabemos para que no desaparezca. Es una prueba de fuego clara para el actual gobierno municipal. Quizá sea una lectura atrevida pero, tal y como han quedado las cosas en Cort, el actual Gobierno municipal puede dejar una huella de esta legislatura en Can Bibiloni, ya que no se han podido salvar otros edificios.

„¿Lo que quiere decir es que ya que Isern no volverá a ser el alcalde puede despedirse dejando como herencia esa protección?

„Sí, exactamente. Es un edificio de Bennàssar, que responde a un pasado industrial poco conocido. Además, si solo se protegen las fachadas y se recuperan algunas partes, permitiría un proyecto arquitectónico de bandera, ya que no hay manera de conseguir que haya proyectos arquitectónicos buenos.

„¿A qué se refiere?

„Nos duele mucho la postura del Colegio de Arquitectos, que se ha apuntado a la tesis del 10 por ciento, es decir, que total solo queda por proteger un diez por ciento y que es más difícil hacer así las intervenciones arquitectónicas, por lo que es mejor dar libertad al arquitecto. Este no es el Colegio de Arquitectos que conocíamos. Si el Colegio de Arquitectos que conoce el tema y sabe cómo se hacen estas cosas en otros sitios no puede valorar las fachadas y lo que significan para la historia de la ciudad... Comprendo que, tal y como está la situación, considere que hay que hacer proyectos, que los arquitectos están hartos de estar parados. Lo puedo entender, pero como entidad ciudadana tengo que decirlo. A veces Arca está muy sola ante algunas cosas.

„¿Tienen alguna respuesta a su reclamación de un catálogo para los bienes de Sa Nostra?

„Hace dos años le pedimos al Govern que interviniera para protegerlo y también al Consell Insular para que declarara las colección con el fin de protegerla. Es muy fácil trasladar unas colecciones. Dicen que no ha ocurrido, que no se ha disgregado ni trasladado y que están los listados de las colecciones a disposición de la administración pública. No hace mucho hablé con la directora insular, Catalina Sureda, y le insistí en este tema. Solo se trata de aprobar la declaración de bien catalogado. Sa Nostra tiene sus inventarios de colecciones, así que en un año se podría haber hecho. Dicen que están en ello y ponen excusas. Como se haya ido ya un cuadro a la sede central de BMN en Madrid, lo cierto es que al Consell ya se le habrá pasado el asado. Nos dicen que eso no ha ocurrido, pero puede pasar y si llega ese momento habrá sido en connivencia con el Consell por no haber actuado. Hay algo sangrante, porque esas colecciones son un patrimonio de los ahorradores mallorquines. Si se pudo comprar el Barceló era por beneficios de los ahorros mallorquines. Quizá muchas de las joyas de la colección fueran del Montepío. Es un patrimonio hecho poco a poco por el pueblo de Mallorca.

„¿Han conseguido que el Govern les haga caso en su petición de que incluyan en los Presupuestos inversiones para patrimonio?

„No he tenido tiempo de mirar el proyecto de presupuestos para el próximo año. Pedimos inversiones en sitios como Torres de Temple, Can Weyler, Santueri... Quizá no se pueda todo, pero se puede elaborar una lista de prioridades. También que se contemplara este tema desde la vertiente del mecenazgo, con beneficios fiscales para quienes inviertan en patrimonio. Creo que eso está totalmente olvidado. También les pedimos que dijeran a los suyos de Madrid que para los presupuestos generales del Estado tuvieran en cuenta a Balears en lo que se refiere al patrimonio. El Govern, como mínimo, debería dejar al menos el terreno preparado para los que vengan.