Balears registra diariamente una media de casi siete rupturas matrimoniales. Durante el pasado año las islas contabilizaron 2.500 divorcios, separaciones y nulidades, según el informe publicado ayer por el Instituto Nacional de Estadística, muy lejos ya de los números que había antes de la crisis. Como referencia, recordar que en 2007 se contabilizaron 3.773 disoluciones de matrimonios en el archipiélago.
Si se compara el número de casos por habitante, Balears es la cuarta comunidad autónoma con un mayor tasa de rupturas, al situarse en 2,3 por cada mil residentes en el archipiélago. Por encima quedan Canarias, con tres disoluciones; Cataluña, con 2,5; y Valencia, con 2,4. La media española se sitúa en 2,1, y en el lugar más bajo aparece Extremadura, con 1,4 casos cada mil habitantes.
De estas 2.500 disoluciones del archipiélago, 2.389 correspondieron a divorcios, 107 a separaciones y tres fueron nulidades.
En el caso de los primeros, la mayoría se alcanzaron de mutuo acuerdo, con 1.889 casos, frente a los 500 en los que se tuvo que recurrir a un contencioso.
En casi la mitad de los divorcios que se registraron en las islas (1.155 casos) los cónyuges no tenían hijos.
Respecto al miembro de la pareja que pasa a ejercer la custodia de los hijos, en la mayoría de los casos sigue apareciendo la madre, con 787, mientras que en 61 pasa a recaer sobre el padre. Es destacable que en 301 divorcios, la custodia pasa a ser compartida.
En relación a la duración de las relaciones, la cifra más alta de divorcios se registra cuando la pareja lleva más de 20 años casados, con 652 casos. En segundo lugar se producen cuando la duración del matrimonio oscila entre los cinco y los 10 años, con 601 divorcios, mientras que en 392 de ellos la ruptura se produjo tras 10 a 15 años de matrimonio.
Presentación de la demanda
La mayoría de las demandas de divorcio presentadas en Balears se producen de mutuo acuerdo, con909 casos, mientras que en 877 ha sido la esposa la que ha optado por dar ese paso. Las demandas presentadas por el marido alcanzan las 589.
Respecto a la nacionalidad de los divorciados, en la inmensa mayoría los cónyuges son españoles. Pero en el caso del marido, aparecen 269 casos de americanos, 121 del resto de la Unión Europea, siete de europeos no comunitarios, 70 de africanos y 49 de asiáticos.
Respecto a la esposa, entre las no españolas el primer lugar lo ocupan las americanas, con 308 divorcios, mientras que las mujeres de otros países de la UE suman 167, y europeas no comunitarias aparecen 29. A ellas hay que sumar 34 africanas, 12 asiáticas y dos de Oceanía.
