El conseller de Hacienda, José Vicente Marí, afirmó ayer que el Govern quiere "poner más renta disponible en los bolsillos de los ciudadanos" a través de medidas tendentes a "estimular algo más el consumo". Estas iniciativas se plasmarán en el proyecto de Presupuestos de la Comunidad para el próximo año, que prevé presentarlos en el Parlament el 30 de octubre. Marí no aclaró si las medidas se centrarán en una rebaja de impuestos, aunque recordó que el president del Govern, José Ramón Bauzá "ya ha dicho" que si se producen modificaciones tributarias serán "a la baja".

"Tomaremos las decisiones cuando toque", contestó Marí sobre esta cuestión al ser preguntado tras el Consell de Govern. Previamente sostuvo que "en Balears "se pagan menos impuestos que la media" estatal ya que, entre otras cuestiones, "el Govern no tocó el IRPF" en el tramo autonómico.

Sostuvo que los tres factores para el crecimiento económico son el sector exterior, la demanda interna a través del incremento del consumo y la inversión pública. "Sabemos que en Balears hemos salido de la crisis por la vía del sector exterior", dijo Marí quien aseguró que, además, existe ya "más consumo en los pequeños comercios". A ello añadió una estrategia de inversión pública por parte del Govern basada en el "fomento de I+D+I y las energías renovables" además de la depuración de aguas.

En este contexto, resaltó que "la opción" del Govern es estimular un poco más el consumo interno de las islas, para lo cual es necesario que los ciudadanos dispongan de más renta.

Previamente el conseller había defendido la política presupuestaria del Govern en esta legislatura, asegurando que el Ejecutivo "midió bien" las medidas adoptadas. En este sentido, resaltó que el resultado ha sido el del incremento de la recaudación de tributos en un 14, 8 por ciento en el primer semestre de este año con respecto a 2013.

Marí efectuó estas declaraciones tras presentar el proyecto de ley de racionalización y simplificación del ordenamiento legal y reglamentario de Balears, aprobado ayer por el Govern, que afecta a unas 250 normas y deroga de forma expresa 223 decretos y dos leyes (una de 1988 que modificaba un apartado de la ley del suelo y la de tasas por inspecciones y controles sanitarios de carne de 1997). Además, el proyecto prevé refundir 7 leyes y la consolidación de 11 decretos que deben ser consolidados.

El proyecto de ley se centra en la derogación de las normas en desuso, obsoletas o que han perdido su finalidad y la reordenación del resto con el fin de "mejorar la coherencia de nuestro ordenamiento normativo", según explicó el conseller de Hacienda.