El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, acabó ayer con cualquier esperanza del president del Govern, José Ramón Bauzá, de que se atendiera su reivindicación para una reforma del modelo de financiación autonómica, al dejar claro que en estos momentos es “imposible” este cambio mientras no se recupere la economía. “Ahora no tiene sentido un nuevo modelo”, dijo Rajoy rechazando claramente una de las principales reivindicaciones de Bauzá ante el Gobierno central.

El otro pulso del president balear con el Ejecutivo de Rajoy es el del rechazo a las prospecciones petrolíferas, respecto a las cuales Rajoy evitó descartar del todo la posibilidad de que se produzcan aunque se comprometió a no autorizarlas si existe el más “mínimo indicio” de que esos sondeos puedan provocar “el más mínimo problema” medioambiental. Añadió que, no obstante, es un “asunto que va para largo”.

El presidente, quien aseguró que está en “permanente contacto” con Bauzá para tratar sobre las proyectos de prospecciones, obvió que ya se realizaron sondeos en 2013 en aguas de Balears, sin autorización y mediante cañones de aire comprimido, que provocaron un grave impacto en el fondo y la fauna marinos. La realización de estas prospecciones consta en un informe de la conselleria de Medio Ambiente del Govern ocultado a la opinión pública durante más de un año, hasta que esta semana DIARIO de MALLORCA destapó lo ocurrido.

Rajoy efectuó estas declaraciones tras despachar con el Rey por primera vez en el Palacio de Marivent desde que Felipe VI asumió la Corona. El presidente también se pronunció, escuetamente, sobre el ingreso en prisión del exjefe del Ejecutivo balear, Jaume Matas, a quien en su día Rajoy ponía como ejemplo de lo que deseaba para todo el país. “Sobre este asunto no me queda más que respeta r las decisiones que adopten los tribunales de Justicia a estas alturas”, se limitó a responder al ser preguntado sobre el encarcelamiento de Matas para cumplir condena por tráfico de influencia.

En lo que se refiere a la financiación autonómica, Rajoy recordó que él mismo votó en contra del actual modelo, pero después se produjo una caída de los ingresos del orden de “70.000 millones de euros entre 2008 y 2009”, lo que hace que sea “imposible un cambio del modelo” de financiación en estos momentos. “No tendría sentido”, dijo el presidente quien afirmó que “ahora el objetivo es la recuperación económica” y que, mientras, el Gobierno intenta resolver “problemas concretos” de las comunidades autónomas. Como ejemplo, puso la decisión de rebajar los intereses y ampliar el plazo de devolución de las ayudas el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) para “aliviar la situación” de las autonomías que se acogieron a este mecanismo, como Balears. “Eso es lo razonable”, zanjó Rajoy.

Precisamente la situación económica fue uno de los asuntos que trató con el Rey en el despacho que celebraron en Marivent. El presidente expuso a Felipe VI los datos de desempleo registrados en junio y resaltó la buena “evolución” de la economía, aunque precisó que no puede estar “satisfecho” mientras “el nivel de desempleo sea el que es”. Tras afirmar que hay menos personas en el paro que cuando empezó la legislatura, se refirió al crecimiento económico en el primer semestre del año y consideró que estos datos demuestran que la política de su Ejecutivo está dando resultados.

No obstante, mostró su preocupación por las sanciones rusas a productos agroalimentarios españoles, aunque confió en que este asunto sirva de “estímulo” para que el sector siga trabajando. También confió en que la economía europea mejore, a pesar de los malos datos del primer trimestre del año, y que en Italia den resultado “las reformas” anunciadas por el primer ministro de aquel país.

Por otro lado, Rajoy aseguró que en su reunión de ayer no trató con Felipe VI sobre el reto soberanista de Cataluña puesto que ya informó al Monarca después de entrevistarse con el presidente de la Generalitat, Artur Mas. El presidente calificó de “absolutamente ilegal” la consulta independentista convocada para el 9 de noviembre y afirmó que el futuro de Cataluña es un asunto que “corresponde decidir al conjunto de los españoles”, si bien descartó tajantemente la posibilidad de convocar en España “ningún referéndum” sobre este asunto. “No lo voy a hacer, ya lo he dicho muchas veces”, reiteró Rajoy, quien insistió en que estará “abierto al diálogo” siempre. “Ley y diálogo, esa es la posición del Gobierno, que es la única que puede mantener”, concluyó.

Rajoy y Don Felipe también trataron del ataque de Israel a Gaza, respecto al cual el jefe del Ejecutivo consideró “urgente” que las partes acuerden un alto el fuego y consideró que el único “horizonte político” en la zona es un diálogo en el que se acuerde la existencia de “dos países independientes que puedan vivir en paz, libertad y con seguridad”. Preguntado por la intención del PP de modificar la ley electoral para las elecciones municipales con el fin de que gobierne la lista más votada, aunque tenga menos del 50 por ciento de los votos, Rajoy dijo que “no hay adoptada una decisión definitiva” pero dejó claro que no considera esta iniciativa “descabellada” y que está incluída en “los programas” del PP y del PSOE.