PSIB y Més consideraron ayer que ha llegado el momento de que a Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina se les retire el título de duques de Palma, mientras que el PP insistió en que para adoptar esta decisión debe esperarse a que haya una "sentencia firme".

Para la portavoz del PSIB, Pilar Costa, "la causa está ya lo suficientemente avanzada" como para que, una vez que el juez instructor haya concluido que hay motivos para mantener la imputación de Urdangarin y Cristina de Borbón, se les retire el título. Más dura fue Fina Santiago, diputada de Més, quien consideró que si los duques de Palma "no son dignos de asistir a la coronación del Rey, tampoco lo son de ostentar este título". Santiago afirmó que "la evolución judicial del caso Nóos confirma que la abdicación del rey Juan Carlos responde, en gran medida, a este caso de corrupción".

Frente a esta postura, la portavoz parlamentaria popular, Mabel Cabrer, sostuvo que cuestiones como la retirada del título de duques de Palma deben analizarse "cuando haya una decisión firme", algo que todavía no ha ocurrido. "Entendemos que son aspectos que de cara a la ciudadanía generarán controversia y desconfianza y por ello se pondrán sobre la mesa, pero cuando haya una sentencia firme", declaró Cabrer.

Tanto la portavoz popular como las dirigentes del PSIB y de Més mostraron su "respeto" a las decisiones judiciales, aunque en el caso de la portavoz socialista y sobre todo de Fina Santiago sus declaraciones fueron más contundentes en apoyo al juez Castro que las de Cabrer.

"Debe llegarse hasta el final caiga quien caiga", declaró Pilar Costa quien incidió en que el caso se agrava al estar "implicada la hermana del Rey". Añadió que el auto del juez José Castro supone "un paso más hacia lo que será un futuro juicio sobre uno de los casos de corrupción más sonados en las islas", si bien consideró que "hay que ser prudentes al máximo ya que la resolución del juez Castro no es firme y, como ya han anunciado algunas de las partes, incluyendo el Ministerio Fiscal, se podrá recurrir".

Por ello, Costa prefirió poner el acento en que el caso Nóos forma parte de "una trama en la que está implicado el expresident del Govern, Jaume Matas, del PP, que abrió una etapa negra" en la política balear. "Esperemos que todo esto sirva para que nunca más vuelva a pasar lo que ocurrió con ese Govern de Matas y que, caiga quien caiga, se llegue hasta el final".

Por ello, Costa defendió al fiscal anticorrupción Pedro Horrach y, tras mostrar su "respeto" por la decisión de recurrir la imputación de la Infanta, recordó que "la Fiscalía Anticorrupción ha jugado un papel fundamental en Balears en la lucha contra estos casos".

Fina Santiago, en cambio, resaltó que "por lo general el fiscal es el que acusa y el juez suele poner límites a las acusaciones, pero aquí ocurre al revés y el fiscal actúa como defensa". La diputada de Més confió en que "el actual Rey Felipe VI y la Casa Real no influyan en las futuras decisiones del sistema judicial y no pongan el aparato del Estado al servicio de los intereses particulares de su hermana".

Mabel Cabrer afirmó que el auto del juez Castro supone que "se materializa la normalidad en el funcionamiento de la administración de Justicia" e insistió en el "respeto" a la decisión judicial y "también" al derecho de la defensa a recurrirla. En relación con todos los imputados del caso Nóos, la portavoz popular sostuvo que el PP "siempre ha dicho que la corrupción es de personas, no de siglas políticas" y que los populares condenarán "rotundamente" lo que haya hecho "alguien que, tras un procedimiento judicial, resulte condenado".