­La cocina del Hospital Psiquiátrico, que confecciona también las comidas de los pacientes en el Hospital General, está bajo mínimos por lo que la colación de ayer tuvo que se elaborada por tres pinches y por el responsable del servicio, que también cuenta únicamente con esta titulación. Y el motivo no es otro que no se están cubriendo ni las bajas ni las vacaciones de los cuatro cocineros titulares.

El IB-Salut confirmó ayer este extremo al admitir que, en estos momentos, hay un cocinero de vacaciones, dos de están de baja y el cuarto tenía turno de tarde en la jornada de ayer, por lo que hubo de recurrir a esta solución de emergencia. Desde el Servei de Salut alegaron que estaba prevista la contratación de otro cocinero pero que no lo hallaron en la bolsa de trabajo de Son Espases, hospital del que depende el Psiquiátrico, y que ahora procederán a buscarlo en los bolsines de los restantes hospitales públicos o, en su defecto, en el Servei de Ocupació de las islas (SOIB). También recalcaron que uno de los pinches que elaboró la comida de ayer -potaje de garbanzos y frit de sepia-, aunque no tiene la titulación requerida, "ha ejercido muchas veces de cocinero en GESMA".

Las fuentes que se pusieron en contacto con este rotativo para denunciar estos hechos, que prefirieron mantener su anonimato, aseguraron que en la cocina del Psiquiátrico se confeccionan menús para sus 160 pacientes y para los cerca de 90 que están ingresados en el Hospital General. Y que la política de no cubrir a trabajadores de baja o en vacaciones ha provocado que un cocinero acumulara hasta 21 días sin librar.