-Para que se haga cargo del tipo de entrevista: "¿Hizo trampa?"

-No he comido nada sólido en cuarenta días, solo bebí agua potable y marina. No sentí hambre ni dolor hasta los últimos cinco días. Me puse en huelga como un revulsivo para los profesores. Afrontábamos un fin de curso desanimados y quise impulsarlos a votar en las europeas.

-¿Le molesta que le digan que comía en la huelga?

-Forma parte de la política de Bauzá. Me consta que dijo que yo comía, y que no se reunía conmigo porque soy un delincuente. He tenido condenas ya saldadas, el president hacía la guerra psicológica para tranquilizar a los suyos, que sufrían.

-Bauzá no se ha movido para negociar, ¿el president le ha ganado el pulso?

-No, estoy contento del castañazo que se pegó en las elecciones, y en el que algo tengo que ver tangencialmente. Bauzá ha pasado del mejor al peor resultado del PP. Ya tenía el desgaste, la huelga de hambre fue el empujoncito que envió a votar a los profesores.

-Bauzá dice que ganó las elecciones europeas.

-Ya nos va bien que siga, es el mejor contrincante que podemos tener en 2015. Entre que se lo carguen los jueces o el pueblo, prefiero que sea el pueblo con sus votos. Bauzá es el Mourinho de la política, divide a los suyos y motiva al rival. Lo humilla, le mete el dedo en los ojos.

-¿El mérito de los cien mil manifestantes contra el TIL es de la Assemblea de Docents o de Bauzá?

-En un ochenta por ciento, de Bauzá. El enemigo es fundamental, y ahora ha cometido otro error con mi huelga de hambre. Una sentencia del Tribunal Superior le puso una solución en bandeja para evitar la huelga, pero dictó un decreto ley el mismo día para anularla.

-¿Cuántos de estos manifestantes huirán a Podemos?

-Tengo compañeros de lucha que han votado Podemos. No los veo como un enemigo, pero se han de articular.

-¿Por qué ha cristalizado una propuesta radical como la Assemblea, impensable hace una década?

-Porque los sindicatos se han alejado de las salas de profesores. No supieron percibir la marea, y les pasó por encima. Ahora los profesores se han puesto las pilas. Vuelven a estar muy animados por los resultados electorales, al ver que el PP no es invencible.

-¿Su vida ha corrido peligro en la huelga de hambre?

-El día 37 empecé a notar dolor de cabeza y a medirme el azúcar. Los tres médicos me dicen a continuación que "estás en fase de alto riesgo y pueden aparecer consecuencias irreparables". Lo dejé tras una cuaresma.

-"Controvertido" quiere decir que nos cuesta identificar a Jaume Sastre con Gandhi.

-Gandhi también era controvertido, Churchill lo llama "ridículo fakir desnudo". Pedro J. me tildó de "sujeto indescriptible", y pienso con Dalí que "hemos de sembrar la máxima confusión posible". Me han creado fama de violento, racial y xenófobo, pero nunca he tenido quejas de un alumno. Soy combativo y he dado caña, pero he demostrado que sé encajar. La libertad de expresión es para quienes no piensan como tú.

-¿Su biografiado Cañellas le envió algún mensaje?

-Hubo un intercambio de sms. Me escribió que no vendría por cuestión de principios, le respondí que todos teníamos principios respetables.

-Recibió durante su huelga a Cristòfol Soler, Antich, Huguet y al diputado popular Biel Martí.

-Y a otros que me pidieron confidencialidad. Busqué un apoyo transversal para la huelga de hambre. Por eso le pregunté antes a Soler si vendría a verme, y lo hizo en ocho ocasiones. Conocí a Huguet en Canal 4, he sido profesor de los hijos de Antich y Martí vino a título estrictamente personal. Me dijo que tenía una hija maestra, y que parase porque no podía dormir.

-Convivir cuarenta días con Jaume Santandreu en sa Casa Llarga también es un reto.

-Bauzá ha reconciliado a muchos que manteníamos polémicas duras. Podemos decirnos el nombre del cerdo, pero cerramos filas cuando nos tocan lo nuestro.

-¿Matas es un corrupto y Munar no?

-Munar está en la cárcel y otros van por la calle. Me molesta la diferencia de tratamiento, que hemos visto de nuevo con Bauzá y Aina Salom. Se cambia de criterio según el acusado y los acusadores. Soy de Sant Joan. Nuestro alcalde puede ser un ladrón, pero lo hemos de quitar los santjoaners, y no acepto que los de Montuïri nos gestionen el ayuntamiento.

-¿Qué Mallorca quiere usted?

-No tengo nada que ver con la imagen que me han colgado. No le pregunto a la gente de dónde viene, ni cuál es el color de su piel, ni sus apellidos. No le pido que renuncie a su lengua o a su cultura. En Mallorca tenemos un diez por ciento más de inmigrantes que en otros sitios. Quiero que haya un elemento hegemónico, nuestra lengua y cultura, para que no desaparezcan. No quiero anular las otras, que son enriquecedoras. Habrá mallorquines con apellidos rusos o bereberes.