­El exconseller de Educación y Cultura entre 2006 y 2007 en el Govern de Jaume Matas, Francesc Fiol, defenderá pasado mañana ante el juez Castro la legalidad del contrato a dedo de Santiago Calatrava para diseñar una Ópera en Palma. Fiol ha sido exculpado del caso Ópera, una pieza separada del Palma Arena, y este lunes tendrá que declarar como testigo.

El archivo de la causa para Fiol, Calatrava y dos excargos del Ibisec, el instituto del Govern que aportó los fondos para pagar el anteproyecto, se dictó tras no mantener acusaciones contra ellos la fiscalía anticorrupción y la abogacía de la Comunidad Autónoma.

Fiol, cuyo abogado era Bartomeu Vidal, ya ha declarado dos veces por el caso Palma Arena. Todo parece indicar que el lunes se mantendrá en sus argumentos.

El exconseller inicialmente estaba acusado de plegarse a los deseos del president del Govern Jaume Matas para contratar irregularmente a Calatrava, al margen de la normativa legal, y de revestir el expediente.

Según la fiscalía anticorrupción, Matas impulsó el proyecto del Palacio de la Ópera en el Moll Vell, que también incluía una costosa remodelación de la fachada marítima de Palma, como gancho electoral para su candidatura a president del Govern en las autonómicas de mayo del 2007.

Seguir la Ley

Fiol fue interrogado en febrero del 2011 por el juez Castro y en mayo de ese año por el magistrado del Tribunal Superior de Justicia Javier Muñoz, dado que en esa época era aforado, por su condición de diputado del PP en el Parlament.

En ambas comparecencias el exconseller de Cultura defendió la legalidad del expediente administrativo de contratación de Calatrava y rechazó que se hubieran malversado fondos públicos.

Anticorrupción y el juez Castro sospechan que Calatrava no cumplió lo pactado con Matas, puesto que no ha aparecido en el Govern su anteproyecto de Ópera.

El arquitecto valenciano tenía que haber construido dos maquetas del Palacio de las Artes Escénicas, pero solo se localizó una en el Govern. Los investigadores sospechan también que Calatrava se plagió a sí mismo y copió un proyecto para el Lago Lucerna (Suiza), diseñado 18 años antes.

En contra de lo que opinan los investigadores, Fiol sostuvo que cualquier administración tiene la capacidad de realizar una contratación directa sin pasar por un procedimiento de concurso. El exconseller mantuvo que Calatrava era uno de los mejores arquitectos-ingenieros del mundo, y añadió que el Govern tenía mucho interés en contratarle para que realizara un gran diseño que supusiera una transformación radical del Moll Vell de Palma.

El ahora testigo admitió que la orden para que la conselleria de Cultura y Educación fichara a Santiago Calatrava partió del president Jaume Matas, que desde hacía meses mantenía contactos con el arquitecto. Fiol manifestó que él desconocía esas conversaciones previas.

El declarante se mostró tajante en defender la legalidad de la contratación directa de Calatrava y sin concurso, debido a la excepcionalidad del proyecto y el prestigio de su autor.

El entonces imputado comparó el fichaje de Calatrava con la contratación, sin concurso, por el Govern del Pacte en 2011 del tenista Rafael Nadal para promocionar las islas.

Según Fiol, el Govern de Matas escogió al Ibisec para financiar el proyecto de Ópera porque era una empresa dedicada a construir edificios educativos y culturales. Las obras de construcción saldrían después a concurso.