El Consell Consultiu acordó ayer emitir un dictamen favorable a la orden de aplicación del Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL). No obstante, reclama al Govern que rectifique la polémica norma porque considera que jurídicamente la orden de aplicación contempla aspectos que no están previsto en el decreto inicial. Los juristas del alto órgano de consulta estuvieron reunidos durante más de 4 horas y el dictamen que valida el TIL tuvo que salir adelante gracias al voto de calidad del presidente, el reconocido abogado Rafael Perera.

Pese a este voto favorable, el dictamen que saldrá a la luz pública la próxima semana supone un serio correctivo para el Govern. Según ha podido saber este periódico, uno de los aspectos que critica el informe del Consultiu es el famoso “equilibrio lingüístico” a la hora de aplicación del TIL en los colegios. Los centros educativos, tanto los concertados como los públicos, entendían que mediante este equilibrio se les daba autonomía para aprobar el proyecto lingüístico que se ajuste a su alumnado. Sin embargo, desde la conselleria de Educación lo niegan e intentan limitar esta autonomía de los centros docente mediante la orden para aplicar el TIL. Este es uno de los aspectos que el Consultiu exige al Govern que cambie, ya que la limitación de la autonomía no está contemplada en el decreto.

Asimismo, la ponencia debatida por los juristas lanza toda una batería de críticas al Govern sobre su política educativa. Entre otras cosas, le recrimina su constante reglamentación y modificaciones educativas sin una coordinación. Primero fue la libre elección de lengua, después el TIL con la posibilidad de que los centros realizaran su proyecto, después se eliminó esta potestad y, en medio de todo ello, toda una serie de normativas que afectan a los docentes. De igual modo, el Consultiu considera que la orden del TIL no contempla algunos aspectos de la LOMCE.

El voto de calidad del presidente Rafael Perera fue necesario para aprobar el dictamen favorable del TIL con consideraciones. Los 5 juristas nombrados por el PP votaron a favor, mientras que los cinco progresistas en contra. Estos últimos anunciaron un voto particular más contundente. Esta votación se realizó en un clima de enfado de los miembros que integran el alto órgano jurídico con el Govern, tal y como adelantó ayer este periódico. Critican que tengan que emitir un dictamen por la vía de urgencia.