La mayoría de ciudadanos de las islas creen que las listas de espera suponen el principal problema de la sanidad pública. Así lo ha señalado el 60% de los encuestados en el último análisis de la Fundación Gadeso, centrado en el sistema de salud público: "Que miles de pacientes tengan que esperar largos meses para ser atendidos por un especialista u operados no es aceptable si de verdad aspiramos a un servicio de calidad", concluye la entidad.

En la lista de problemas, la falta de instalaciones y de personal es el principal problema para un 42% de los baleares. Un 38% también considera muy grave la introducción del copago sanitario y un 35% deplora "los intentos de privatización de algunos servicios y centros públicos". La retirada de la tarjeta sanitaria a los personas inmigrantes en situación irregular es uno de los defectos más graves para el 21%.

Con todo, el sistema sanitario público no solo recibe el aprobado por parte de los usuarios sino que incluso aspira al notable ya que le dan una valoración global de 6,3, una nota que la fundación entiende como "relativamente satisfactoria". Señala no obstante que se observa una tendencia a la baja según los últimos barómetros del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), "sin duda ocasionada entre otros factores la política sanitaria de los actuales gobiernos". La sanidad es para el 36% los ciudadanos el aspecto más importante del estado de bienestar, seguido por un 25% que prioriza la educación. Las últimas investigaciones tanto del CIS como de Gadeso posicionaron el estado de la sanidad como la quinta preocupación de los ciudadanos, solo por debajo del paro, los problemas económicos, la corrupción y la clase política.

A pesar de la nota positiva que recibe el sistema sanitario, tres de cada diez ciudadanos consideran que en general ha empeorado a lo largo del último año, mientras un 54% cree que sigue igual y un 15% constata una mejora. Atención Primaria es el servicio más utilizado y mejor valorado (con un 6,6) por los isleños, pero en este caso casi un 40% acusa un empeoramiento en los últimos doce meses. Respecto a la asistencia especializada, Urgencias y hospitalización, en los tres casos alrededor de un 30% denuncia que el servicio ha ido a peor.

Respecto a la prestación recibida, casi un 90% cree que hay diferencias en función de si el usuario tiene permiso de residencia o no. Un 38% acusa diferencias en función de si pertenecen al hábito rural o al urbano y un 35% cree que el trato varía de una comunidad a otra.

¿La sanidad privada es mejor? Un tercio de los encuestados dice tener seguro privado. De estos, casi la mitad considera que la hospitalización y las asistencia de especialistas es mejor en la privada. La capacitación profesional del personal y los medios tecnológicos son mejores en la pública para el 60% de los entrevistados.