Todo planteamiento que contemple implantar los estudios de grado de Medicina tendrá que esperar, como pronto, a la próxima legislatura. Fuentes de los organismos que han estudiado esta posibilidad en el último año -conselleries de Salud y Educación y la propia Universitat de les Illes Balears (UIB)- explicaron que sería necesario que, como mínimo, se matriculasen cuarenta alumnos por curso para hacer viable económicamente el proyecto en su versión más asequible, esto es, una implantación inicial de tan solo el segundo ciclo de los estudios, los cursos cuarto, quinto y sexto de la carrera.

Las fuentes aludidas aseguraron que empezar por estos tres últimos cursos tendría una clara ventaja: que el coste se reduciría considerablemente. Hay que tener en cuenta que los tres últimos años de estos estudios superiores son más clínicos, más prácticos, más ligados a la práctica asistencial especializada, por lo que la inversión sería mucho más reducida que si se pretendiera implantar la carrera al completo. Los primeros cursos son más teóricos, precisan de más material y, en definitiva, son más costosos.

La cifra que barajan las instituciones que han participado de esta iniciativa es de unos tres millones de euros, un millón por curso académico. Y, pese a ello, recalcaron que sería necesario que se matriculasen un mínimo de cuarenta alumnos por curso para rentabilizar esta inversión.

En este último curso académico, los estudios de Medicina, entre los que no se ofertan en la UIB, fueron los que más traslados de expediente provocaron en la Universitat de les Illes para cursarlos fuera de la comunidad autónoma, con un total de 58 peticiones y por delante de los 38 alumnos que se marcharon para estudiar Bellas Artes o los 34 que emigraron a otras universidades para cursar la profesión más preponderante en este Govern, Farmacia.

Renombre de la Facultad

"Además, en esta tesitura, ¿quién nos garantiza que contaremos con esta cifra de alumnos? ¿Tendremos a cuarenta baleares que, una vez que hayan completado el primer ciclo de los estudios, opte por solicitar un traslado de expediente académico para acabar los estudios en la UIB? No lo sabemos. Para una licenciatura de estas características cuenta mucho el prestigio o renombre de la universidad en la que has obtenido el título. Por no hablar de lo difícil que puede resultar que un alumno que lleva tres años estudiando fuera del hogar materno decida regresar para licenciarse aquí", barajaban las citadas fuentes.

Según éstas, implantar estos estudios de grado ya se habría descartado para esta legislatura. El conseller de Salud, Martí Sansaloni, en declaraciones a este rotativo, ya descartó esta posibilidad alegando que carecía de presupuesto para emprender esta aventura académica. "En estos momentos", declaró a finales del mes pasado, "nuestra prioridad pasa por prestar asistencia sanitaria a los ciudadanos de Balears, no montar una facultad de Medicina".

La cámara autonómica rechazó el pasado 26 de marzo una proposición no de ley (PNL) presentada por el grupo socialista en la que se instaba al Govern a "continuar trabajando, respetando la autonomía universitaria, para implantar el grado de Medicina en la UIB con el consenso de todas las fuerzas políticas de este Parlamente en esta legislatura".

Y el argumento que esgrimió el grupo parlamentario popular para desestimar esta proposición no fue otro que el económico. En esa comisión parlamentaria se reveló que un informe de la Conselleria de Economía y Hacienda fechado el 17 de mayo de 2011 -con el socialista Carles Manera todavía al frente de ese departamento y el promotor de la PNL rechazada, el socialista Vicenç Thomàs, como responsable de la conselleria de Salud-, estimaba el coste total de implantar siete cursos académicos de estos estudios en 25,1 millones de euros.

Un desembolso que el citado informe repartía a bulto de la siguiente manera: 6,5 millones de Salud, 15,3 millones de la conselleria de Educación y 2,3 millones que correrían a cargo del IB-Salut. El documento, en sus conclusiones, dejaba bien claro que este gasto no se podría afrontar con el plan de equilibrio financiero exigido por Madrid en esas fechas. Y que solo con un incremento de ingresos para la CAIB producto de un nuevo modelo de financiación podría plantearse la implantación de estos estudios.