En un paso más en el absoluto enfrentamiento que caracteriza en esta legislatura las relaciones entre el PP y la oposición, el Parlament se convirtió ayer en una sucesión de peticiones para declarar personas non gratas en Balears a responsables políticos a causa de las prospecciones petrolíferas en aguas de Balears.

El primero en lanzar el ataque fue Més, cuyo portavoz parlamentario, Biel Barceló, anunció tras la Junta de Portavoces del Parlament que su grupo presentará una proposición no de ley para que la Cámara balear declare persona non grata al ministro de Industria, José Manuel Soria. Minutos después la portavoz parlamentaria popular, Mabel Cabrer, contestaba con el anuncio de la presentación de otra propuesta, en este caso del PP, para declarar personas non gratas a los expresidentes socialistas del Gobierno central y del Govern en la pasada legislatura, José Luis Rodríguez Zapatero y Francesc Antich, y al que fuera conseller de Medio Ambiente, Biel Vicens, miembro del PSM (partido mayoritario de la coalición).

Los motivos de Més para declarar persona non grata a Soria son que "siendo el ministro que también ha de velar por los intereses turísticos, se dedica a impulsar estas prospecciones". Soria se mostró a favor de estos sondeos incluso cuando el president del Govern, el popular José Ramón Bauzá, le mostró su frontal rechazo. Además, Més también pedirá en el Parlament que se apruebe solicitar al Gobierno central la autorización para convocar una consulta popular en Balears sobre las prospecciones.

"No se puede ser más hipócrita ni tener más caradurismo político", fue la inmediata respuesta de la popular Cabrer en referencia a Més. Afirmó que la petición de declarar a Soria persona non grata es "una pantomima" ya que "Soria no ha dado ninguna autorización para las prospecciones", sino que fue el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero el que lo hizo en 2010, mientras Antich y Vicens "lo aceptaron sin hacer nada para pararlas". A ello añadió que David Abril, actual diputado de Més, era director general en la conselleria de Medio Ambiente y "tampoco se rebeló" contra esta medida.

Al recordársele que Soria se pronunció a favor de estas prospecciones y que quien tiene la posibilidad de pararlas es el actual Gobierno central, Cabrer afirmó que el ministro de Industria "tiene sobre la mesa las autorizaciones ya concedidas" por Zapatero y "no es posible retirarlas sin indemnizaciones", por lo que la única vía para pararlas es a través de informes negativos medioambientales. Por ello, precisó que la presión del Govern en lo que se refiere al Gobierno central se dirige hacia el ministerio de Agricultura y Medio Ambiente, es decir, ante Miguel Arias Cañete y no ante Soria.

En cuanto al referéndum, la portavoz popular consideró que "no es necesario" ya que en Balears "todo el mundo ha mostrado su rechazo, con recogida de firmas masiva y la unanimidad del Parlament".