Unas 200 personas se han concentrado esta tarde frente a la sede del Govern, el Consolat de Mar, como medida de apoyo a los directores de centros educativos expedientados por la conselleria de Educación, Cultura y Universidades que también han estado presentes en la protesta.

La concentración ha sido un acto de "solidaridad" con los equipos directivos "injustamente sancionados" y de reclamación al presidente del Govern, José Ramón Bauzá, para que asuma su "responsabilidad" y cumpla con el "consenso" que prometió al asumir su cargo, ha señalado el Antonio Morante, presidente de la Asociación de directores de Secundaria de Mallorca.

"Parece increíble que todo un presidente del Govern no tenga ni cinco minutos en todo lo que llevamos de legislatura para hablar de educación, que si lo puede hacer en Valladolid en un entorno que le resulta cómodo y no en Baleares porque sabe que es una situación incómoda", ha incidido Morante, tras la concentración.

En la protesta, que ha concentrado a unas 200 personas a pesar del mal tiempo, han estado los directores de Menorca expedientados, Jaume Bonet, Rafel Andreu y Margalida Seguí, el director del instituto de Marratxí, Jaume March, los equipos directivos docentes que han dimitido, representantes sindicales, de asociaciones de padres y madres, y profesores en general.

Andreu, director del instituto Pascual Calbot de Menorca, ha señalado que esta protesta se ha puesto de manifiesto la oposición de los docentes "a la política nefasta que lleva a cabo este gobierno que está hundiendo el sistema educativo de Baleares".

En opinión de Andreu, que ha vuelto a su cargo tras seis meses de sanción, con la combinación de "mediocridad y autoritarismo" de la política educativa balear "se ha retrocedido como mínimo cuatro o cinco años" en el trabajo pedagógico de los centros.

"Se trata de una cadena de despropósitos y ante la impotencia de esta Conselleria por lo mal que se hacen las cosas, la única solución que tienen es abrir expedientes a diestro y siniestro, como parte de una campaña represiva para coaccionar a los equipos directivos en primer lugar y al profesorado en general", ha señalado Andreu.

En relación al decreto de tratamiento integrado de lenguas (TIL), en cuya aplicación ha estado el origen los expedientes, el director menorquín ha destacado que no se ha incumplido la normativa por parte de los centros, pero que ésta "ha sido tan chapucera" que desde hace un año se venían planteado una serie de dudas, porque era "impracticable".

"Las medidas educativas de este gobierno son imposibles de llevar a la práctica, en los centros cumplimos la normativa como podemos pero la realidad de las aulas es que esto es un fracaso", ha reivindicado Andreu, que ha señalado que se trata de "una lucha" no por los docentes sino por "la educación y el futuro" de Baleares.

Por su parte, la representante del STEI-i Maria Antònia Font ha informado de que desde los sindicatos se propone que si un director dimite otro docente no acepte el cargo y en el caso de que lo nominen que también renuncie.

"Las razones son justificadas y no se trata de tapar huecos sino de hacer visible el casos que ha creado la Conselleria y la necesidad de consenso de los proyectos que se han de aplicar en los centros educativos", ha precisado Font.

Durante la concentración, convocada por los directores de los centros educativos de Baleares, se ha leído un manifiesto, en el se ha exigido el "cierre de los expedientes abiertos y el cese definitivo de la estrategia intimidatoria y represiva" de parte de Educación.