La infanta Cristina pasó ayer toda la mañana reunida en Barcelona con sus abogados para ultimar su declaración judicial de hoy, cuando comparecerá como imputada en Palma ante el juez José Castro.

Según se pudo comprobar, doña Cristina llegó al bufete de abogados Roca-Junyent de Barcelona en coche hacia las 10.00 horas y lo abandonó con el mismo vehículo sobre las 15.00 horas, en medio de una gran expectación mediática.

El juez instructor del caso Nóos interrogará hoy como imputada a la infanta Cristina para que aclare si participó en delitos de fraude fiscal, como copropietaria de la sociedad Aizoon, y si blanqueó mediante gastos privados fondos públicos obtenidos de forma ilícita por su marido, Iñaki Urdangarin.

A su llegada al despacho, uno de los abogados de la infanta, Miquel Roca, ha asegurado que Castro "es un gran juez, muy correcto", y que confía plenamente en su actuación de cara a la declaración que su representada hará hoy.

Por su parte, el letrado Jesús Silva, que comparte la defensa de la infanta junto con Roca, discrepó de la petición del fiscal de que doña Cristina pague unos 700.000 euros en concepto de responsabilidad civil a título lucrativo, e insistió en que, cuando "las aguas se tranquilicen", la mayoría de españoles verán que la Infanta es inocente.

Se espera que hoy por la mañana doña Cristina viaje desde Barcelona a Palma para asistir a su declaración.

En principio, la Infanta no viajará con su marido, ni con nadie de su familia y volverá a Barcelona esta tarde-noche.