La Diputación Permanente del Parlament, órgano que mantiene la actividad de la cámara fuera del periodo de sesiones, rechazó con los votos del PP convocar una sesión extraordinaria para analizar el conflicto educativo de las islas. Ante esta negativa de los populares, la diputada socialista Cristina Rita pidió ayer la dimisión de la consellera Juana María Camps y acusó al Partido Popular de convertir el conflicto educativo "en una bomba de relojería que puede estallar en cualquier momento".

La parlamentaria socialista, durante su intervención en la Diputación Permanente, criticó que el grupo parlamentario popular hubiera rechazado celebrar un pleno extraordinario centrado en el conflicto en el sector educativo. Al mismo tiempo denunció que la conselleria de Educación está adoptando "una actitud de constante provocación y autoritarismo con el colectivo docente". Rita calificó de "munición explosiva" la Ley de Símbolos y los expedientes a los directores.