El exdirector del IES Marratxí, Jaume March, ha decidido poner en manos de la justicia su suspensión al frente del instituto. En un recurso contencioso-administrativo, solicita que se levanten las medidas cautelares decretadas contra él por la conselleria de Educación ya que considera que se han vulnerado sus derechos fundamentales.

Jaume March, que ha comparecido ante los medios de comunicación acompañado del secretario general de UGT, Manuel Pelarda, y de la secretaria general de FETE-UGT, María Alarcón, defiende en su recurso que el expediente que abrió a la alumna por grabar una conversación con el jefe de estudios del centro entraba dentro de sus funciones como director y, por tanto, no se le puede suspender por este hecho.

"Se están extralimitando al interponer medidas cautelares", ha dicho March, quien ha censurado el comportamiento de la Conselleria con él y los directores de Mahón, también expedientados porque las sanciones dictaminadas posteriormente han sido inferiores a las medidas cautelares. Además, ha añadido que parece que la conselleria "quiere castigar aquellos centros que tienen mejores resultados académicos".

Por su parte, Maria Alarcón ha recordado que la Junta de Personal Docente está estudiando la posibiliad de interponer una querella contra los responsables de Educación por prevaricación. "La Administración está utilizando su poder para sancionar a los empleados públicos con el objetivo de coaccionar y silenciar a los docentes"; ha criticado Alarcón.

Manuel Pelarda también ha cargado contra las políticas del Govern en materia de Educación. "Es inconcebible que en el siglo XXI se tomen represalias en el ámbito educativo contra los profesores que están educando a los futuros dirigentes de esta tierra. No es propio de una democracia".