Los colegios públicos y concertados de Baleares no podrán exhibir la bandera cuatribarrada catalana, en favor de la cultura y lengua catalanas, y de los lazos verdes en protesta contra la política educativa del Govern del PP y en defensa de la educación pública de calidad.

El Parlament balear aprobó ayer con el apoyo mayoritario y único del PP la Ley sobre el Uso de Símbolos Institucionales de las Islas Baleares, que prohíbe el uso de símbolos no oficiales en los edificios públicos de la Comunidad Autónoma y que regula el uso de banderas y escudos.

Los diputados de la oposición, el PSIB-PSOE y MÉS, salieron de la sala para no votarla como signo de protesta y gritaron en el salón de los pasos perdidos "libertad, libertad, libertad".

El vicepresidente y conseller de Presidencia, Antoni Gómez, defendió durante el debate parlamentario que los inmuebles públicos no pueden ser "soporte" para manifestaciones y reivindicaciones "personales y partidistas".

A partir de ahora, en los edificios oficiales y en los colegios públicos y concertados sólo podrán lucir las banderas y símbolos oficiales, aunque se podrá pedir permiso previo a la Administración autonómica si se quiere exhibir algún otro con motivo de la celebración de días señalados.

El diputado socialista Cosme Bonet advisrtió de que el día de hoy será recordado como "el día de la infamia contra la libertad de los ciudadanos de la Islas Baleares; por el peor ataque contra la libertad de expresión de nuestra historia reciente".

Desde MÉS, el diputado Nel Martí criticó durante un minuto que se trata de una "ley mordaza que ataca la libertad de expresión". Seguidamente, mostró un cartel reivindicando la libertad de expresión y se calló durante unos minutos a modo de protesta.

El PP se opuso también a la petición de la oposición de que la ley de símbolos pasara un segundo examen del Consell Consultiu para analizar su constitucionalidad.