La portavoz del Govern, Núria Riera, afirmó ayer que la consulta soberanista catalana "no tiene cabida en la Constitución" y por lo tanto "no se puede ni se debe celebrar". Riera mostró el respaldo del Govern a la reacción del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien rechazó que vaya a autorizar la consulta poco después de que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, anunciara el jueves el acuerdo con los partidos pro-consulta para que el 9 de noviembre del próximo año se celebre el referéndun en el que se preguntaría a los catalanes si quieren que Cataluña se convierta en un Estado y, de ser así, si desean que ese Estado sea "independiente".

La portavoz consideró que la negativa de Rajoy no da una mala imagen del Gobierno español en el exterior, sino todo lo contrario ya que supone una defensa de la Constitución, que es la "norma suprema del Estado".

El acuerdo con los partidos pro-consulta para la celebración del referéndum ha provocado una fuerte polémica e incluso el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, advirtió de que la UE no aplicaría tratados a Cataluña si se declara la independencia, ya que se convertiría en "un tercer país respecto a la UE", a la vez que confió en que España permanezca unida