El expresident Jaume Matas suma una condena más a su historial. Los nueve miembros del jurado pupular determinaron ayer por unanimidad que es culpable de haber exigido el pago mensual de tres mil euros al hotelero mallorquín Miguel Ramis, hecho que es calificado de presunto cohecho.

Durante la lectura del veredicto, el portavoz del jurado manifestó que, tal y como han considerado probado, los pagos por 3.000 euros mensuales que se le abonaron a Areal "no era más que una prebenda o donación" más que un salario por un trabajo por cuenta ajena. Una conducta de la que pudo beneficiarse el exministro gracias a la "ascendencia y capacidad de influencfia" que le otorgaba su cargo.

El tribunal popular cree que las pruebas aportadas en la vista han puesto de manifiesto que el empresario se sintió presionado por la posición que ocupaba el entonces líder del PP balear.

Como consecuencia, simuló la contratación de Areal como empleada del hotel Valparaíso, con un salario mensual de 2.938 euros que sumado a dos pagas extras le reportaron ingresos de 42.111 euros. Este dinero fue cobrado por la esposa del presidente, según ha considerado demostrado el jurado, sin que Areal llevara a cabo tarea alguna, por lo que constituía un simple regalo en consideración al poder de su marido.

En su pronunciamiento, el jurado expresa también su oposición a que Jaume Matas se beneficie de una suspensión de la condena y a que le sea concedido el indulto por parte del Gobierno en el caso de que lo solicitara.

Tras la lectura del veredicto, la Fiscalía pidió para el acusado tres meses de multa, con una cuota diaria de 100 euros, tal y como había solicitado en su escrito de acusación. Por su parte, la defensa de Matas ha pedido que le sea aplicada la mínima pena prevista en la ley para este delito.

Sobre Jaume Matas ya pesa una condena por corrupción, la de 9 meses de prisión por tráfico de influencias establecida el pasado verano por el Tribunal Supremo, por haber favorecido con dinero público un periodista que le escribía discursos.