De cara al próximo curso, en un total de 87 centros educativos de las islas debía renovarse el periodo de mandato del director vigente o nombrar a uno nuevo. En 41 colegios e institutos no se presentó ningún candidato al puesto en la primera instancia.

Cada curso la conselleria de Educación se topa con este problema: en algunos centros nadie quiere aterrizar o continuar en el despacho del director. Los motivos los explica un director de instituto de la Part Forana, que no quería continuar en el puesto pero que finalmente seguirá dos años más tras haber sido ´invitado´ por la Conselleria ante la falta de candidatos.

"Es una posición difícil: estás entre la Administración y los compañeros", narra, "y has de ir asumiendo lo que va llegando, con pocos medios, cero autonomía y todas las responsabilidades". Además, el momento actual, con la polémica e incertidumbres respecto a la aprobación y puesta en marcha del decreto del tratamiento integrado de lenguas (TIL) y con la próxima aplicación de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa, es complejo para los directores: "El TIL, más alumnos por aula, más conflictividad...".

Esta circunstancia no es nueva. Pero este año los centros están extrañados con el retraso que está experimentando el proceso de designación y nombramiento de los directores, ya que a día 9 de julio aún no se han hecho públicos y oficiales los nombres. La Conselleria ha pedido a directores actuales que continúen en el puesto y algunos han aceptado, pero de momento todo ha sido, explican, "de forma extraoficial". Ante la falta de candidatos, si el responsable del equipo directivo declina continuar (o no puede al haber excedido los periodos de mandatos establecidos), Educación suele enviar a los inspectores a los centros para analizar y sondear qué profesor podría ocupar el cargo. Si no convence a nadie, la Conselleria puede designar a quien considere.

Directores accidentales

Desde la Asociación de Directores de Secundaria (ADESMA) siempre se ha criticado que se llegue a este punto y que finalmente se acabe nombrando como director a alguien que en principio no quería serlo. Además de una posible falta de motivación, al designar de esta forma al responsable del equipo directivo, no hace falta que éste presente un proyecto de dirección. Además, los directores accidentales son nom?brados para periodos de dos años en vez de cuatro,dificultando así dar estabilidad al proyecto de centro.

Para el próximo curso, 27 directores de centros educativos de Balears (16 colegios, diez IES y una escuela de idiomas) debían decidir si renovaban su mandato: 17 se han presentado para continuar, según la resolución publicada el pasado 6 de julio. Por otro lado, en otros 60 centros se puso en marcha el proceso de selección de aspirantes y en un primer término sólo se presentaron 29 candidaturas. Parece más difícil lograr interesados en los colegios que en los institutos: en los primeros, hacían falta 42 directores y se presentaron 18; en los centros de secundaria, había 14 vacantes y sólo cinco quedaron sin candidato. Aún no se han publicado las listas oficiales con los nombres de los que serán directores el próximo curso.