Los representantes de la coalición Més y del grupo ecologista Gob denunciaron ayer la falta de seguridad existente en el proyecto de desdoblamiento del segundo cinturón de Palma, y no dudaron en calificar de "irresponsabilidad" el que está vía vaya a circular a escasísimos metros de los depósitos de carburante de CLH que se encuentran junto a Son Ferriol sin que se haya pedido previamente un informe a la Dirección General de Emergencias.

Los portavoces de Més en el Consell de Mallorca y en el Consistorio palmesano, Joan Font y Antoni Verger respectivamente, y la representante del Gob, Margalida Ramis, acompañados de los presidentes de la asociación de vecinos Sa Creu Vermella y de la asociación de comerciantes de Son Ferriol, Antoni Bennassar y Jesús Torres, comparecieron ayer públicamente para denunciar lo que consideran irregularidades en la tramitación del proyecto de ampliación de este eje viario en las proximidades de las citadas instalaciones de CLH.

Según apuntó Joan Font, la legislación estatal sí exige un informe de Emergencias para calibrar el riesgo que existe a la hora de hacer pasar una carretera a una distancia tan corta de depósitos de combustible, aunque reconoció que la autonómica no contempla esa necesidad, pero insistió en que se trata de una irresponsabilidad el no haber tomado esta medida, especialmente si se tiene en cuenta que la ampliación del segundo cinturón contempla un descenso en la altura de esta vía, lo que según Més eleva el riesgo para los conductores que circulen por las inmediaciones. Además, se recuerda la proximidad de una gran rotonda.

Margalida Ramis respaldó esta denuncia y advirtió de que el peligro que se genera es doble: en primer lugar, cuando se ejecuten las obras y se emplee maquinaria junto a CLH, y posteriormente cuando por el nuevo trazado de esta vía circulen los automóviles.

Parar la tramitación

Por ello, solicitaron la paralización del proyecto en ese punto, para evitar la adjudicación de las obras en el citado tramo, al menos hasta que se disponga de un informe elaborado por la Dirección General de Emergencias.

En opinión de Margalida Ramis, el desdoblamiento del segundo cinturón de Palma ha dejado de estar justificado debido al descenso que se ha registrado en el número de vehículos que circulan por los accesos a la ciudad y por el hecho de que se trata de una vía de circunvalación que el PP ha decidido que quede inconclusa, al renunciar al tramo que debía comunicar la autopista de Inca con las inmediaciones del hospital de Son Espases.

De este modo, junto a los representantes vecinales, se subrayó que finalmente será una carretera que conectará dos de las grandes superficies existentes en la isla, sin cumplir el objetivo de ayudar a descongestionar la vía de cintura.

Antoni Verger recordó que ya se han adjudicado dos de los tramos del desdoblamiento, en concreto los que se encuentran entre la autopista de Inca y la carretera vieja de Sineu, por un importe de 38 millones de euros, y cuyas obras se deben de iniciar esta primavera, mientras que en breve está previsto adjudicar los tramos entre Son Ferriol y el Coll d´en Rabassa, con un presupuesto inicialmente estimado en 84 millones, siendo en esta segunda parte en la que aparece el trazado próximo a CLH.

Al respecto, tanto Més como el Gob se mostraron muy críticos con el hecho de que el Partido Popular haya decidido impulsar este tipo de obras, destinadas al desarrollo de la red viaria, y que en cambio haya renunciado a prolongar el ferrocarril desde Manacor hasta Artà, especialmente porque ambas actuaciones tenían que venir financiadas con fondos procedentes del ministerio de Fomento.