La sanidad pública balear registró durente el año pasado 1.442 interrupciones voluntarias del embarazo, lo que supuso un descenso de los abortos del 53,3 % en comparación con 2011, según los datos de la conselleria de Salud difundidos ayer por las asociaciones Derecho a Vivir e Instituto de Política Familiar.

El 95,6 % de los abortos registrados por el Ib-Salut se llevaron a cabo en 2012 en centros hospitalarios públicos y el resto en clínicas privadas concertadas para realizar esas intervenciones con financiación de la administración sanitaria.

Esta proporción entre las interrupciones voluntarias del embarazo realizadas en centros públicos y privados es casi completamente contraria a existente en 2011, cuando el 91,8 % de las intervenciones se realizaron en clínicas concertadas. Derecho a Vivir y el Instituto de Política Familiar de Baleares consideran "histórico" el descenso del aborto.