Como estaba previsto, hubo acuerdo unánime. Las pequeñas y medianas empresas de alquiler de vehículos pactaron ayer trasladar su domicilio fiscal fuera de Balears -Euskadi ofrece las mejores condiciones tributarias- y emprender movilizaciones en respuesta a la ecotasa del Govern. Solo una rectificación en el último instante del vicepresidente económico, Josep Ignasi Aguiló, impedirá el órdago de los ´rent a car´.

La mudanza a la península antes del 31 de diciembre irá acompañada de una jornada reivindicativa en Palma. El presidente de la patronal Aevab, Ramón Reus, anunció "protestas en el centro de la ciudad", aunque no fijó la fecha en que la flota de alquiler tomará el casco urbano de la capital. El contraataque del sector culminará con "quince días sin alquilar coches" y "actuaciones jurídicas". El abogado de Aevab, Manolo Pomar, tacha el impuesto medioambiental de "discriminatorio" porque exime a autobuses, taxis y coches particulares. "Además -advierte Pomar-, es falso que sea ecológico. Solo tiene una finalidad recaudatoria".

"Otro principio básico en la implantación de los impuestos es que estos nunca pueden tener un carácter confiscatorio, es decir, que su coste sea tan elevado como el servicio prestado. Se puede dar el caso de que en temporada baja se pague 9 euros diarios por un vehículo que se alquila por 15", señala el documento del asesor fiscal de Aevab, Francisco Ramis.

Los pequeños negocios contemplan el despliegue de la ecotasa como una defunción. "Los que tengan una flota inferior a cien vehículos no podrán continuar", reconoce uno de los empresarios presentes en la asamblea. Varias compañías están a un paso de la quiebra. Hasso, una de las firmas con más solera, se ha declarado en concurso de acreedores.

Desde la conselleria de Vicepresidencia Económica y Promoción Empresarial se advierte a los industriales de que el cambio de sede fiscal no les librará de pagar el impuesto. "Es un tributo sobre los vehículos, no sobre las empresas", avisa. Pero los negocios ya cuentan con ello. Buscar refugio en Euskadi, dicen, les compensa porque tributarán menos por los impuestos de circulación, actividades económicas y el tramo autonómico del IVA. Ramón Reus calcula que la Comunidad dejará de ingresar unos 40 millones de euros anuales.

Respecto al control de los vehículos de alquiler que circulan por las carreteras de Balears, Vicepresidencia Económica insiste en que "se cruzarán datos entre administraciones", aunque admite al mismo tiempo que se pueden producir casos de fraude. Este diario quiso saber cómo se articulará el registro de la flota que opera en verano, pero el Govern no concretó el mecanismo. Las compañías radicadas en Balears temen que las multinacionales se libren de abonar buena parte del impuesto, ante la dificultad de fiscalizar sus movimientos en la Comunidad.