La presidenta insular, Maria Salom, ha asegurado hoy que el Consell de Mallorca no importará residuos de una empresa italiana como estaba previsto, ante "las sospechas" sobre su trayectoria y porque quiere "hacer las cosas bien, con honestidad y transparencia", por lo que los importará de otro lugar.
Salom ha hecho estas declaraciones a los medios tras visitar la restauración de la capilla de la Trinidad de la Catedral de Mallorca y ha subrayado la voluntad del Consell de Mallorca de seguir adelante con la importación de residuos para amortizar la planta de incineración de Son Reus, pero los traerá de otro lugar.
La presidenta ha detallado que el Consell de Mallorca ha dado instrucciones a la concesionaria del tratamiento de residuos, Tirme, de que "se ponga en contacto con gente cuya imagen, buen nombre y trayectoria empresarial no esté bajo ninguna sospecha", como sucede con la planta italiana de Pescara.
Salom ha dicho sobre dicha empresa que se ha descartado porque "las cosas no están muy claras". "No puede haber la más mínima duda de que una cosa esté mal hecha", ha recalcado.
"Queremos hacer las cosas bien hechas y con transparencia y no que se pongan en contacto con una empresa cuyo propietario o director, su nombre ha estado ligado a causas de corrupción", ha declarado.
La presidenta ha defendido la decisión del Consell de importar residuos como una iniciativa "muy novedosa, medioambientalmente sostenible y muy correcta", y como la mejor alternativa para evitar una subida de la tasa de tratamiento de residuos.
"Quizá hubiera sido mucho más fácil para el Consell decidir subir el recibo de la basura un 50 % a todos los mallorquines y no afrontar una cuestión valiente, que sabíamos que podía traer polémica, para intentar que los mallorquines paguen menos impuestos", ha afirmado.
Salom ha insistido en que importar e incinerar residuos "no es nada excepcional, es una cosa normal que hacen los países más avanzados en cuestiones medioambientales como Alemania o Suiza".
"Lo que desde el Consell pretendemos hacer en Mallorca que no genera ningún problema de salud, ni en el medio ambiente", ha afirmado la presidenta.
Salom ha defendido también la labor de la consellera insular de Medio Ambiente, Catalina Soler, después de que el grupo ecologista GOB haya pedido su dimisión por haber planteado importar residuos de una empresa investigada por presunta corrupción.
La presidenta considera que el trabajo desempeñado por Soler en este asunto está siendo "extraordinario" y "admirable". "Es quien da la cara con esto y yo estoy satisfecha con el trabajo que hace", ha afirmado Salom, que ha dicho no entender que pidan su dimisión.
"Soler está haciendo una labor extraordinaria, no se oculta, da la cara, va a todas partes explicando en Mallorca la realidad de las cosas y va incluso con una muestra del tipo de producto que se quiere traer", ha detallado.
También se ha referido a las críticas de la oposición por el deterioro de imagen para Mallorca por importar basura y ha advertido: "En este tema, si lo tratásemos solo dentro y no hiciéramos demagogia, no habría ningún problema para la economía mallorquina".
"Quien está haciendo daño a la economía mallorquina es la oposición malmetiendo y criticando de una manera absurda este tema", ha insistido Salom.
Ha criticado que haya miembros de la oposición que acuden al pleno del Consell con una máscara puesta para denunciar la importación de basura cuando "ellos son los que han consentido y han gobernado en los gobiernos que han ampliado la planta de incineración".
"Me parece que están haciendo las cosas fuera de lugar y son unos oportunistas políticos. No se debe engañar a la gente con una intencionalidad política", ha zanjado.
