Diez minutos. Eso es lo que tardan los niños de tres años en aprender a desenvolverse con el iPad. Diez minutos o menos. Así lo han comprobado en el colegio Luis Vives de Palma, donde han introducido las tabletas en las clases de primer ciclo de Infantil.

Se dice mucho que las tabletas son fáciles de utilizar porque son muy intuitivas. Y los niños de hoy parece que tienen esa intuición muy desarrollada. Basta ver a Paula y a Daniel en clase jugando a dibujar con el iPad, haciendo puzzles o repasando su nombre con el dedo. Se lo pasan pipa. Y aprenden, en un formato atractivo, interactivo, dinámico, lleno de posibilidades.

El director del centro, Antonio Frau, explica que desde la dirección querían abordar la introducción de las nuevas tecnologías ya desde el principio de la etapa educativo. Y pensaron que los networks, los mini-portátiles que usan en los colegios públicos y concertados, están empezando a quedarse obsoletos. Las tabletas están comiéndoles el terreno y triunfando como el mejor dispositivo para manejarse por internet. "Y nosotros tenemos que estar en la excelencia académica y dar siempre lo mejor", apunta, "por eso nos decidimos por las tabletas, y de entre todas las disponibles nos decidimos por Apple porque nos pareció la mejor y la que tiene más aplicaciones".

"La usabilidad es lo que nos decidió, son de muy fácil manejo", apunta, "muchos niños ya sabían utilizarlas porque sus padres tienen en casa, y los que no sabían nada en diez minutos ya se manejaban". Frau valora los iPad como una herramienta muy útil para esta etapa, como complemento a todos los materiales y recursos ´tradicionales´. De momento, la idea es utilizarlos para Geometría, Matemáticas, Escritura e Idiomas. Y los niños, encantados.

Dibujar y puzzles

Así lo explican Marga Reynés y Patricia Cardona, las tutoras de Paula Martínez Ballester y Daniel Rebollo Ureña, que están concentrados en sus iPad mientras sus profesoras hablan. "Los niños nos piden el iPad, les gusta mucho", dicen. Sobre todo les encantan los puzzles y dibujar (y poder cambiar de color cuando dibujan: eso les encanta).

El formato es nuevo pero lo que aprenden es lo mismo que se aprende en parvulitos desde el principio de los tiempos: colores, números, letras... Han notado que a los niños les resulta más fácil la tableta táctil que el ordenador ya que al ser tan pequeños a veces les cuesta entenderse con el ratón. Pero ellas lo ven claro: "Parece que han nacido para esto, a los adultos nos cuesta más".

¿Y después de estar jugando con el iPad, no rehuyen de los rotuladores de toda la vida? ¿De las fotocopias estáticas? ¿De las tizas y la pizarra? No,aseguran. No se corre ese riesgo de sustitución. Los niños, explican las profesoras, siguen pidiendo los colorines para dibujar en el papel y disfrutan saliendo a pintar en la pizarra (aunque combinen su uso con la pizarra digital, que también les fascina).

Introducir las tecnologías en el aula también es una manera, en especial con los alumnos más mayores, de darles una "cultura digital", de enseñarles como hacer un buen uso de internet y de las nuevas tecnologías y darles pauta para que no hagan un abuso. "Les enseñamos que hay un momento para cada cosa", apuntan las tutoras, que han recibido una formación previa para dar un uso didáctico a los iPad. Ángel Bonmatí, director de sistemas, ha sido el encargado junto a dos personas más de esta formación del profesorado y de buscar las aplicaciones pertinentes.

El director explica que de momento las tabletas se irán implantando de forma gradual en Educación Infantil y que después se plantearán si continúan utilizándolas en los siguientes cursos. La experiencia promete.