La opinión pública mallorquina pide que las autoridades obliguen a Jaume Matas a "devolver el dinero público que robó y que lo haga antes de entrar en prisión". La mayoría de ciudadanos consultados considera "justa" la condena de seis años de cárcel contra el expresident popular por parte de la Audiencia Provincial. Aseguran sin tapujos que "si la ha hecho, que la pague". Creen que la sentencia es "ejemplarizante" y un aviso a navegantes para toda la clase política.

La administrativa Margarita Deyá resume en su opinión el sentir de las calles mallorquinas en el día de ayer: "No me importa si al final va a la cárcel o no. Lo único que pido es que devuelva el dinero de todos". Deyá recordó que nunca se cumplen al completo las condenas y considera prioritario el reembolso del dinero malversado "en estos tiempos en que hay gente que pasa hambre".

A la casi totalidad de los ciudadanos consultados les es indiferente si, al final del proceso, Matas va a prisión. Lo que les preocupa es qué se hará con el dinero público que, según la sentencia de la Audiencia, Matas indujo a defraudar. La jubilada María Araceli Romero se mostró muy dura y dijo que la condena contra Matas es de "pocos años por todo lo que ha robado a los mallorquines". "Considero prioritario –añadió– que se garantice la devolución del dinero antes de entrar en la cárcel, ya que después será mucho más difícil". Margalida Julià, comercial de profesión, apuntó: "Me parece bien la condena y me da igual si Matas va a la cárcel o no. Lo que realmente me importa es que devuelva el dinero de todos".

Carlos Tur, camarero de profesión, mantuvo que si Matas no restablece lo malversado se sentará un precedente y "cualquiera podrá robar sin necesidad de devolverlo".

El empleado José Manuel Gómez afirmó que "lo justo es la devolución del dinero público que robó, pero va a ser muy complicado". De la misma opinión es la dependienta Laura Sánchez, quien considera que el expresident debería cumplir toda la condena, ya que no cree probable que "retorne los euros que se llevó". Del mismo modo, Sánchez estimó que la condena a Matas servirá de ejemplo para el resto de políticos.

El jubilado Francisco Gil reflexionó sobre las consecuencias de la corrupción: "Actuaciones como la de Matas hacen mucho daño a la sociedad. La gente se cree que no vale la pena la democracia porque los políticos son tan malos como los dictadores", aseveró.

Varios de los ciudadanos consultados mostraron su indignación con los dirigentes políticos actuales. El cocinero Miguel Luna lamentó que cada vez "los políticos digan más mentiras a los ciudadanos". Nassib Lakkis, médico de profesión, criticó la falta de honestidad de Jaume Matas que se refleja en la sentencia.